Viviendo en la frustración

En ‘El chico de la última fila’ un profesor descubre en un alumno el escritor que él nunca fue y el joven habla en sus textos de la familia que nunca tuvo.
Carlos Jiménez-Alfaro, recién salido de la Escuela de Arte Dramática de Madrid es el chico que da vida a Claudio.
Carlos Jiménez-Alfaro, recién salido de la Escuela de Arte Dramática de Madrid es el chico que da vida a Claudio.
Carlos Jiménez-Alfaro, recién salido de la Escuela de Arte Dramática de Madrid es el chico que da vida a Claudio.
Juan Mayorga, escritor que antes fue profesor de matemáticas, quiso escribir para celebrar los 20 años de Ur Teatro una obra que plasmara su preocupación por cómo se relacionan dos realidades, a veces opuestas: la familia y la escuela. «El chico de la última fila aborda el encuentro difícil entre dos personas raras, un profesor de lengua y literatura y su alumno, unidos por la pasión de escribir. Ambos tienen mucho en común, son dos letraheridos», explica Mayorga.Germán es un docente cincuentón, que en sus últimos años de carrera se siente muy solo e incomprendido por sus alumnos. Su refugio es la literatura, los grandes escritores. Un día descubre el talento de Claudio, el chico que se sienta en la última fila para pasar desapercibido, cuando manda  a sus alumnos escribir una redacción contando lo que han hecho el último fin de semana. Según va leyendo, cada una le parece peor, excepto cuando llega a la de Claudio. En él ve ese escritor en potencia que él nunca pudo llegar a ser.

¿Dónde está el éxito de su texto? «En la capacidad de observar las vidas ajenas», explica Mayorga. Claudio va contando lo que ve en casa de un compañero al que explica matemáticas: ve una  familia normal, la que él no tiene. En su redacción, y en las sucesivas, se adueña de esas vidas ajenas, como hicieron Tolstoi, Chéjov o Dostoievski y las mira y las cuenta desde la fila ideal para mirar sin ser visto, «el espacio del escritor».

Vocación comunicativa

Para la directora de la obra,  Helena Pimenta, este texto de Mayorga es un ejemplo de la buena situación que vive el teatro de autor contemporáneo. «Creo que obras como ésta tienen una vocación de comunicación con el público importantísima», opina.

* Lope de Vega. Avda. María  Luisa, s/n. Hoy y mañana, a las 21 h. Domingo, a las 20 h. De 6 a 18 1.

¿Posible trilogía?

UR Teatro está planteándose hacer una trilogía sobre la temática de la educación, según explica su directora Helena Pimenta: «Nos gustaría hacer una segunda parte de la obra y una tercera». En estos momentos El chico de la última fila se está traduciendo a varios idiomas: francés, portugués, italiano y griego, y se va a llevar próximamente a Argentina.

Su estreno fue en el pasado Festival de Otoño de Madrid.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento