Las obras del tramo Cicero-Colindres de la Autovía del Agua, licitadas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) por importe de 13,9 millones de euros, comenzarán "a finales" de este año y se prevén que estén acabadas antes de terminar 2015.

Así lo ha anunciado este miércoles en un comunicado el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, un día después de que el MAGRAMA hiciese pública la licitación de este tramo, uno de los últimos que queda por ejecutar para la conclusión de esta infraestructura hidráulica, que se espera que se produzca el año que viene.

Según el Ejecutivo regional, la Autovía del Agua "garantizará" el abastecimiento a toda la población de Cantabria y permitirá una gestión más eficaz y eficiente de los recursos hidráulicos de nuestra región".

Diego ha señalado que estas obras "se suman" a otras "importantes" que, según ha explicado, que se culminarán durante los dos próximos años en Cantabria, financiadas por la Administración estatal y autonómica, encaminadas a lograr la "máxima eficiencia" en la gestión del agua y la "garantía" de que en el futuro este recurso no será un factor que limite el crecimiento económico y la calidad de vida de nuestros ciudadanos".

Ha recordado que el Estado licitará este año las obras necesarias para la finalización del saneamiento de las marismas de Santoña, Noja y Joyel, y en particular, de la construcción del subfluvial de Laredo, cuyo coste asciende a 23 millones.

A esto, se añade la inversión prevista por el Gobierno regional durante este año, que superará los 40 millones con el fin de completar la ejecución de la Autovía del Agua, los saneamientos de Alfoz de Lloredo y la cuenca alta del Pas, además de otras pequeñas obras en distintos núcleos de población.

Labor legislativa

Al margen de estas inversiones, Diego ha subrayado "la labor legislativa y de planificación a corto, medio y largo plazo" seguida por el Gobierno de Cantabria en materia de gestión del agua, basada, según ha afirmado, en los principios de "solidaridad, sostenibilidad y carácter social".

Como ejemplo, se ha referido a la nueva Ley de Abastecimiento de Cantabria, pendiente de aprobación en el Parlamento regional y al Plan General de Abastecimiento y Saneamiento, el cual prevé más de 1.200 obras con una inversión de cerca de 300 millones de euros durante los próximos diez años.

El presidente ha señalado que en 2011 se encontró un "panorama desolador y un futuro lleno de incertidumbres" en el ámbito de las infraestructuras hidráulicas, algo que ha achacado al hecho de que la comunidad no recibió "ni un solo euro de lo prometido por el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero".

Diego ha resaltado el "enorme esfuerzo" realizado, en su opinión, por el Gobierno central y regional, ambos del PP, para dar una solución "urgente, vital y de futuro para Cantabria" en el ámbito de las infraestructuras y de gestión del agua en un "breve espacio de tiempo y en unas circunstancias económicas muy complicadas".

El abastecimiento dejará de ser un "condicionante" para cantabria

Con las inversiones y el trabajo legislativo y de planificación, Diego ha afirmado que el abastecimiento de agua dejará de ser un "condicionante" para el futuro de Cantabria desde esta misma legislatura y ya de forma "definitiva".

A su juicio, se trata de un problema que ha "lastrado" el futuro regional durante los últimos años.