Un jurado popular juzgará entre el martes y el jueves de esta semana a un hombre acusado de matar a su expareja asestándole una puñalada en el abdomen, lo que provocó la muerte inmediata de la mujer. En concreto, los hechos tuvieron lugar el 31 de marzo de 2013 en el domicilio que aún compartían en Palma, y tras cometer el crimen el acusado se personó en una comisaría de policía para relatar los hechos.

La Fiscalía solicita para Mustapha M., quien se encuentra en prisión preventiva desde ese día, 16 años de prisión y que indemnice con 100.000 euros a cada uno de los cuatro hijos que tenía la víctima, y con 25.000 euros al marido de ésta.

Tal y como relata el Ministerio Público en su escrito de calificación provisional, el episodio se produjo después de que ambos mantuvieran una discusión, y tras seguir a su expareja al cuarto de baño donde se introdujo para ducharse, Mustapha M. aprovechó que la mujer estaba desprevenida para, con intención de acabar con su vida, abalanzarse sobre ella de forma sorpresiva e impidiendo cualquier posibilidad de que su víctima pudiera defenderse.

Fue en ese instante cuando el procesado clavó el cuchillo a la mujer, lo que le perforó el hígado y le causó una hemorragia interna cuya gravedad le causó la muerte. Tras ello, el inculpado trasladó el cuerpo hasta el dormitorio de la víctima donde, tras taparla con un edredón y cerrar la cortina para ocultarla, ingirió sosa cáustica y llamó a un taxi para que le condujera a una comisaría.