El testigo protegido era el jefe del operativo de los GEO que actuaron en el piso de Leganés donde se atrincheraron e inmolaron siete terroristas, señalados como siete de los trece autores materiales de los atentados del 11 de marzo de 2004.

"Nos informaron que había un piso en Leganés donde había entre tres y cinco terroristas, autores de los atentados del 11 de marzo, que habían iniciado un tiroteo , y que por tanto conocían la presencia policial en la zona (...) Además nos dijeron que poseían explosivos", ha narrado el jefe de los quince geos que intervinieron esa noche en el piso de Leganés.

El operativo buscaba apresarles vivos

El geo ha asegurado como "un sudirector operativo me dijo que había intervenido una llamada en la que uno de los terroristas decía que esa noche iba a morir."

"Entorno a las 2030 mi jefe directo, me preguntó si habíamos perfilado la operación, se la expliqué y me dio el visto bueno, y a partir de ese momento el asunto era nuestro", ha explicado el geo.

El testigo ha narrado como "a través de la puerta se oían gritos, alaridos, discusiones en árabe. Cuando nos respondían, nos respondían en castellano",

"Nunca decidimos entrar en el piso, sino obligarles a salir con gases lacrimógenos", ha asegurado el agente, añadiendo que una vez derribaron la puerta con una pequeña carga explosiva se inició un diálogo en español "convidándoles a que salieran", a lo cual les respondían desde dentro con "entrad vosotros, mamones".

"Nos empezaron a decir que 'os enviamos emisiarios', a lo que les dijimos que saliera desnudo y con la mano en alta", ha narrado el testigo, añadiendo que esa situación duró unos tres minutos, tras lo que decidieron "tirar los gases y se produjo la explosión".

En la intervención de los geos en Leganés, falleció el subinspector de los GEO Javier Torrontera, quien precisamente estaba al pie de la puerta del piso donde se inmolaron los siete terroristas que se atrincheraban en la vivienda.