El testigo protegido era jefe del grupo de la brigada provincial de información de Madrid el 11 de marzo de 2004.

El agente ha narrado como desde enero de 2003 su grupo investigaba a los hermanos Almallah Dabas, vigilando de especial el local de la calle Virgen del Coro.

Reuniones en el local de Virgen del Coro

"Hacían labores de proselitismo y ayudaban a muyahidines en su paso al extranjero. Detectamos que el centro de toda esa actividad era un local situado en la calle virgen del Coro", ha declarado el testigo protegido, añadiendo que en esas reuniones "se visionaban vídeos de la yihad y otras labores de proselitismo".

"Había una relación más allá de la de casero entre Ghalyoun y Almallah, porque iban a muchos sitios juntos", ha asegurado el testigo.

En febrero de 2004, los agentes detectaron como Ghalyoun se encontró con Fadoual el Akil (amigo del "El Chino") aunque ha asegurado que no llegaron a conocer la existencia de "El Chino".

"Les hicimos vigilancia a todos los que pasaron por Virgen del Coro. Tuvimos constancia del grupo enero de 2003, las vigilancias empiezan a final de marzo (...) y a partir de junio, se judicializó", realizándose escuchas telefónicas.

El testigo ha asegurado que esas vigilancias eran "esporádicas, dependiendo de a quien se vigilara", añadiendo que no se llegó a suspender continuando hasta "fechas bastante posteriores a los atentados del 11 de marzo."

El agente ha contado como los hermanos y las personas que se reunían en el local mantenían una actitud vigilante en todo momento, adoptando "medidas de precaución" por si eran vigilados.

Pocos ingresos, muchos gastos

"Los gastos [de los hermanos Almallah] eran elevados, y no se correspondía al precario nivel de sus ingresos", ha asegurado el testigo, añadiendo que realizaban mucho tráfico de llamadas internacionales y varios viajes a Londres.

"Sin ingresos fijos no se puede tener tres coches, pagar las llamadas que alguien pagaría, y sin ingresos fijos, no se puede mantener a cinco hijos a un mínimo nivel", ha asegurado el testigo.

"Moutaz Allmallah vivía en Londres, y no se le conocía oficio, con un un nivel de gastos elevados. Sabíamos que se movía en el entorno de Abu Kutada", ha asegurado el agente de la Policía Nacional.

El Skoda Fabia y la explosión de Leganés

El agente también participó en el registro del Skoda Fabia, donde "había unas cintas de radiocasette árabe, de tipo comercial, la sobaquera y un pasamontañas además de otros objetos sin importancia a falta de un análisis posterior".

"Por decisión propia, decidí que el coche se llevara a Policía Científica", ha declarado el testigo.

El 3 de abril, el agente se trasladó al piso de Leganés después de oír por "nuestros equipos, y 20 minutos después estábamos allí, en una carrera un poco loco". El agente se encargó de llevar la instrucción de las diligencias respecto a los vestigios hallados entre los restos del piso de Leganés.