La transexual despedida de un geriátrico de Barcelona vuelve ante el juez pero como imputada

  • Agarró del cuello a un médico que no quiso renovarle la baja laboral por ansiedad a su pareja.
  • Inicialmente se celebró un juicio por faltas pero los fiscales lo anularon para considerar la agresión como un delito de atentado.
  • Podrían condenarla a entre uno y tres años de cárcel.
Gina, a la derecha, recibe un beso de su pareja a la salida del juicio celebrada en Barcelona. (Albert Olivé/Efe)
Gina, a la derecha, recibe un beso de su pareja a la salida del juicio celebrada en Barcelona. (Albert Olivé/Efe)
ALBERT OLIVÉ/EFE
Gina, a la derecha, recibe un beso de su pareja a la salida del juicio celebrada en Barcelona. (Albert Olivé/Efe)

Gina Serra, la transexual que fue despedida de un geriátrico por supuesta discriminación sexual , volvió a declarar el miércoles frente a un juez en Barcelona como imputada en un supuesto delito de atentado a la autoridad por agredir a un médico que se negó a prorrogar la baja por ansiedad de su pareja.

La mujer agarró por el cuello el pasado 21 de febrero a un médico del Instituto Catalán de Evaluciones Médicas (ICAM) encargado de contorlar las bajas laborales.

Este es el primer caso conocido en que un juez de Barcelona abre diligencias por un delito de atentado tras una presunta agresión a un médico, después de que José Maria Mena , ex fiscal jefe del Tribunal Superior de Justica de Catalunya (TSJC) ordenara a los fiscales que persigan como delito las agresiones a profesores y médicos públicos.

Inicialmente, dos días después de producirse la presunta agresión, tuvo lugar un juicio por faltas, pero la Fiscalía pidió que se suspendiera y solicitó que el caso fuera tratado como delito de atentado a funcionario.

Perdió los nervios

El día de los hechos, Joana López, pareja de Gina, se puso muy nerviosa y se negó a abandonar la consulta hasta que el médico le prorrogara la baja, por lo que el médico decidió llamar al vigilante de seguridad, según explicaron fuentes judiciales.

En ese mismo momento, Gina Serra, al ver que su novia no salía de la consulta, entró en la consulta y agarró por el cuello al doctor.

López ha relatado que su pareja "perdió los nervios" al ver que era tratada "de forma tan grosera" y actuó "fruto de la indignación" pero sólo agarró "dos segundos y con una mano" al médico.

A pesar de ello, una coordinadora médica presente en los incidentes llamó a los Mossos d'Esquadra y denunciará la agresión.

Tratamiento vejatorio

Joana López ha explicado que aunque el vigilante de seguridad no la tocó si la trató "de forma intimidatoria" tratándola "en masculino, cuando yo soy mujer" y "llamándome payaso".

Según el Código Penal, las penas por atentado pueden suponer una condena de uno a tres años de prisión.

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