El presupuesto para la Renta Básica de Inserción (RBA) de este año "se agotó en los primeros meses del año", de manera que las solicitudes que están entrando "no tienen presupuesto" y de concedérselo tendría que ser con cargo a los de 2015 o ampliar la partida. En concreto, "unas 1.700 familias en la Región son perceptoras de esta ayuda".

Así lo ha expuesto en rueda de prensa este jueves la secretaria de Política Social y Juventud de UGT en Murcia, María Dolores Abellán, quien ha resaltado, en este sentido, que de los alrededor de 2.000 expedientes que se están gestionando, "400 se han concedido y no hay presupuesto para pagarlos".

Por ello, ha reclamado al Gobierno de Alberto Garre que "actúe de forma inmediata por el bien de la Región y se sensibilice con este problema", dado que los números no son nada positivos si tenemos en cuenta que a primeros de año, según datos del Ministerio, "existen en la Región 19.400 hogares sin ningún tipo de ingreso, ni salario, ni subsidio, ni pensión, ni ayuda social", de los que 9.100 tienen a su cargo algún menor de 16 años.

Por ello, Abellán ha denunciado públicamente la actual situación de muchas familias en la Región "que se encuentran en un grave riesgo de exclusión social, sin que las actuales ayudas públicas en la materia sean suficientes para garantizar su protección respecto a esta situación".

Y es que, ha precisado, "en Murcia se ha experimentado de forma especialmente intensa el aumento de las personas bajo el umbral de la pobreza y en riesgo de exclusión", ya que la tasa se ha elevado desde 2008 a 2012, al pasar del 26 al 30 por ciento, ha expuesto.

Del mismo modo, añade, la Renta Media de los hogares "ha bajado en ese mismo periodo un 14,5 por ciento, mientras que los indicadores de carencia material han experimentado un repunte brutal desde el inicio de la crisis, que sitúan a la Región como la Comunidad en la que los hogares atraviesan mayores carencias materiales".

En concreto, los hogares que no pueden permitirse salir de vacaciones al menos una semana al año ha pasado a incrementarse de un 44 a un 63,6 por ciento; los hogares sin capacidad para afrontar gastos imprevistos pasan del 38,7 al 53,3 por ciento; los que han tenido retrasos en pagos relacionados con la vivienda en los últimos 12 meses, de un 4,2 han aumentado hasta un 19,7 por ciento; y los hogares que han experimentado tres carencias de una lista de siete que incluye cosas tan básicas como poder comer carne, pollo o pescado al menos cada dos días han aumentado de un 16,6 a un 25,3 por ciento.

En lo que respecta a las Ayudas periódicas de Inserción Social, que son las de último recurso de las familias con menores a cargo en riesgo de exclusión social, "han ido recortándose desde los casi ocho millones que tenían destinados en 2010 al escaso millón de euros que se ha presupuestado en 2014".

Ha llamado la atención, al hilo, que "de nuevo este año, una orden del IMAS suspendió en abril la concesión de ayudas de este tipo por agotamiento de la partida presupuestaria, dejando desamparadas a miles de familias".

Y respecto a la RBI, Abellán ha sostenido que "su tasa de cobertura es la segunda más baja de todo el país y desde luego, se encuentra muy lejos de la tasa de cobertura media, que es del 11,7 por ciento". "Murcia es la única comunidad de todo el territorio español que no ha aumentado su cuantía por beneficiario, ni su duración, durante todo este periodo de crisis, con lo que se mantiene cada vez más alejada de las cuantías que perciben los destinatarios de rentas mínimas en otras comunidades", indica.

Abellán también ha criticado que "con 300 euros por titular al mes, es la comunidad con la cuantía mínima más baja, un 28,7 por ciento inferior a la media y menos de la mitad de lo que recibe como cuantía mínima un titular de este tipo de prestaciones en Navarra".

Por todo ello, desde UGT Abellán ha reclamado el desarrollo de un Pacto por la Inclusión Social que "condicione la revisión de la actual Ley de Servicios Sociales y determine la elaboración de un Catálogo de Servicios Sociales en Murcia que permita el refuerzo de las políticas sociales en un momento como el actual".

Así, aboga por "reforzar las dotaciones presupuestarias de las dos ayudas económicas existentes, articulando nuevas tipologías de ayudas de emergencia social y complementos autonómicos al sistema de garantía de mínimos", además del "desarrollo del reglamento de la RBI, evitar retrasos en la concesión de pago de estas solicitudes aprobadas y publicar los datos más actualizados sobre rentas mínimas de inserción".