La propietaria de la agencia de viajes de Gijón acusada de estafar a 209 clientes ha aceptado este miércoles dos años de prisión a cambio de devolver a los afectados los 200.000 euros abonados, y se ha comprometido a pagar un multa de 2.400 euros, tras llegarse a un acuerdo de conformidad en el inicio del juicio en la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias, según ha confirmado a Europa Press uno de los abogados el caso, Miguel Ron Ribera.

El dinero a abonar no incluye indemnizaciones por los perjuicios causados. El pago se hará en una primera entrega de 100.000 euros, y el resto en plazos durante dos años. De no hacerse el abono de las cantidades, se retiraría la suspensión de la pena de prisión y entraría en la cárcel a cumplir la condena. Para alcanzar este acuerdo fue necesario que fuera aceptado por la totalidad de los denunciantes.

Inicialmente, la Fiscalía de Área de Gijón había solicitado seis años de prisión y una multa de 2.400. El Ministerio Público también le pedía a la imputada que indemnizara a cada perjudicado con la cantidad supuestamente estafada, más 600 euros a cada uno por los daños morales causados, y con la cantidad que se acredite en sentencia por los seguros de viaje abonados.

De acuerdo al relato fiscal, tras la creación de la agencia en 2005 junto a su marido, entre los meses de febrero y septiembre de 2011, la acusada comenzó de forma intencionada a formalizar contratos de ventas de viajes no reales, sin abonar los vuelos ni los hoteles, ni pagar a los mayoristas, ni las pólizas de seguros que los clientes concertaban.

Los perjudicados fueron alumnos de la Facultad de Medicina de Oviedo, de la de Psicología, de Administración y Dirección de Empresas de Oviedo y de Ingeniería Técnica de Gijón, los cuales no pudieron realizar sus viajes de estudios, pese a ser abonados todos ellos con sus seguros. También resultaron perjudicadas familias que contrataron sus vacaciones, particulares que contrataron viajes y parejas que abonaron su viajes de novios.