El diputado nacional del PSOE por Sevilla Alfonso Guerra ha considerado que la permanencia de la vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Magdalena Álvarez, al frente de su cargo tras ser imputada en firme, por parte de la Audiencia Provincial de Sevilla, en el caso de los supuestos ERE irregulares "no es una locura", indicando que, en todo caso, "el dimitir o no es una decisión personal de cada uno".

Cuestionado en rueda de prensa con motivo del inicio de la campaña de las elecciones europeas en la provincia de Sevilla, Guerra, asimismo, ha hecho hincapié en las "muchas dudas" que le plantea la investigación llevada a cabo por la juez Mercedes Alaya, "pero no solo a mí, sino a los jueces; los magistrados de la Audiencia, que la corrigen; o los fiscales, que le piden que suelte la investigación".

"No me da ninguna tranquilidad", ha incidido el diputado socialista, que expresa sus reticencias a que "lo que esté saliendo tenga mucho que ver con la realidad", recalcando su "nula" confianza en las pesquisas emprendidas por el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla.

El Banco Europeo de Inversiones está en contacto permanente con el ministerio de Economía y mantiene una "posición común" sobre el caso de Magdalena Álvarez, según explicaron recientemente fuentes europeas. De acuerdo con estas fuentes, las dos partes tenían previsto "actuar conjuntamente" si la justicia confirmaba la imputación de la exministra, aplicando el código de conducta del BEI.

Álvarez —cuyo salario asciende a 23.000 euros al mes— fue nombrada vicepresidenta del BEI en el año 2010 para ocupar la silla que comparten España y Portugal, y su mandato no concluye hasta 2016.