La Asociación de Productores Europeos de Bananas (APEB) ha abogado por continuar manteniendo hasta el año 2020 las producciones comunitarias, sus hectáreas y la renta de los productores, tomando las medidas que sean necesarias para contrarrestar los acuerdos de la UE con los países latinoamericanos que obvian las condiciones de seguridad alimentaria y medioa ambiente.

Así se ha puesto de manifiesto hoy miércoles en una reunión de la APEB que se ha celebrado en Santa Cruz de Tenerife y que ha contado con la presencia del presidente de Asprocan, Santiago Rodríguez; el presidente de la APEB, Leopoldo Cólogan; el director de la UGPBAN, Philippe Ruelle, y el director de la GESBA, Jorge Dias.

La APEB se constituyó en Canarias el 21 de noviembre de 1989, cumpliendo en 2014 los 25 años de existencia, y representa a a las producciones comunitarias de plátano de Martinica/Guadalupe (Francia), Madeira (Portugal) y Canarias (España), todas ellas regiones ultraperiféricas productoras que en su conjunto suponen 19.956 hectáreas de superficie, 11.930 productores y una producción aproximada de 700.000 toneladas.

Según la Asociación, "esta unión ha hecho posible que los productores comunitarios de plátano le hayamos hecho frente a sucesivas reformas que en contra de nuestros intereses se han realizado constantemente por parte de los países latinoamericanos y de las multinacionales bananeras de Estados Unidos".

La finalización de los sistemas de abastecimiento en 1993, conllevó el reconocimiento de las autoridades internacionales y comunitarias de la necesidad de establecer ayudas directas a los productores europeos de plátano para el mantenimiento de sus producciones en las diferentes regiones.

Desde entonces, señala la APEB, "los productores han mantenido su compromiso, haciendo uso eficaz de las ayudas que recibían para mantener un cultivo que, en el caso de Canarias, ocupa el mismo número de hectáreas y de productores que entonces, así como una mano de obra fija estable, tanto en fincas como en centros de empaquetado".

Desde la Asociación han querido recordar que las ayudas que han recibido los productores comunitarios en una primera etapa fueron percibidas a través de la OCM del plátano, y que fue a partir de 2007 cuando las mismas se incorporaron a los programas POSEI de las diferentes regiones ultraperiféricas.

Ahora bien, aclaran que la incorporación del plátano europeo a estos programas se hizo aportando por parte del sector una ficha financiera propia de 280 millones de euros, de los que 141 millones correspondieron a Canarias debido a su volumen de producción de plátano dentro del volumen total de producción europea.

Según la APEB, "este nivel de ayudas fue plenamente reconocido por la Unión Europea en el año 2007 y desde entonces no ha habido modificación alguna a pesar de que las bananas de terceros países se han visto claramente beneficiadas de nuevos acuerdos que permiten su entrada al mercado europeo en muchos casos sin restricciones, al mismo tiempo que los costes de las producciones comunitarias han continuado aumentando anualmente".

Los productores inciden en que la existencia del sector platanero comunitario "se debe sin ninguna duda a la unión que hemos mantenido en nuestras respectivas regiones".