Medio centenar de activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) han ocupado este miércoles una oficina barcelonesa del Banco Sabadell para reclamar la condonación de la deuda y un alquiler social para una mujer y sus dos hijos pequeños, quienes fueron desahuciados de su hogar y cuyos ingresos no superan los 390 euros mensuales.

Los manifestantes se han concentrado en los Jardinets de Gràcia y se han dirigido a la oficina situada en el número 458 de la avenida Diagonal, donde han desplegado varias pancartas y han colgado decenas de folletos de colores con sus denuncias y reivindicaciones. Los activistas piden cambios legislativos y soluciones concretas para todos los afectados.

Para la PAH, el caso de esta mujer, Marcela, ejemplifica "cuán abusiva es la legislación hipotecaria española". La familia fue desahuciada y el banco sigue reclamándole 208.000 euros por la diferencia entre el precio de tasación y el de subasta, así como las tasas e intereses. Ahora viven en un bloque ocupado por la plataforma que podría ser desalojado pues hay una denuncia penal por la ocupación.

La plataforma explica que la negociación de casos como el de Marcela es especialmente difícil porque la entidad financiera que le concedió la hipoteca ha sido absorbida por otra y "nadie se quiere responsabilizar y las familias afectadas son ninguneadas una y otra vez mientras su angustia va en aumento". Ante la protesta, la entidad ha accedido a reunirse con representantes de la PAH.

Un portavoz de Banco Sabadell ha explicado a 20minutos que no quieren eludir responsabilidades pero que este caso no depende de ellos. Ha explicado que el Sabadell compró al Banco Mare Nostrum (BMN) buena parte del negocio en Cataluña y Aragón, que mayoritariamente corresponde al de Caixa Penedès, pero no se quedó con "créditos conflictivos" como el de Marcela. Se da la circunstancia de que BMN no tiene oficinas en Cataluña.

Finalmente, después de varias horas de protesta, la entidad bancaria ha accedido a condonar la deuda a Marcela y le ha ofrecido un piso con alquiler social, según ha destacado la PAH de Barcelona.

Sin embargo, un portavoz de BMN ha explicado a este periódico que, el 31 de mayo de 2013, ante la situación económica de Marcela —que dejó de pagar las cuotas de dos pisos en Barcelona—, accedieron a reducir la deuda de 208.000 a 5.000 euros, cantidad que le permitían pagar a partir de abril de 2015 en diez años, con una cuota de 51,98 euros mensuales. Ante la protesta de este miércoles, la entidad ha accedido a condonar totalmente la deuda e intenta buscarle una vivienda.