La Fiscalía de Siniestralidad Vial del Principado de Asturias solicita la condena de cuatro años y medio de prisión para un ciudadano rumano acusado de provocar un accidente de tráfico en el que falleció una persona y resultaron heridas otras cuatro, tras saltarse un semáforo en el cruce de las calles General Elorza, Avenida de Pumarín y Foncalada, en Oviedo.

El acusado dio positivo en las pruebas de alcoholemia. La vista oral está señalada para los días 11 y 18 de julio de 2014, en el Juzgado de lo Penal número dos de Oviedo, a las 09.00 horas, según ha informado el Ministerio Fiscal a través de una nota de prensa.

Además de prisión, el fiscal pide privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante seis años (lo que conllevará la pérdida del carné o imposibilidad de sacarlo durante ese periodo, en el caso de no tenerlo, según el artículo 47 del Código Penal), el pago de multas que suman 4.680 euros (con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago) y el abono de 383,81 euros al propietario del vehículo que conducía, por los perjuicios ocasionados.

Además, la Fiscalía solicita que el acusado, y como responsable civil directo y solidario el Consorcio de Compensación de Seguros, haga frente a indemnizaciones por valor de 216.300,93 euros, junto con el pago de los gastos que acrediten el Principado de Asturias (por la intervención del servicio de Bomberos), el Ayuntamiento de Oviedo (por la de la grúa municipal) y el Sespa (por la asistencia de las víctimas)

La Fiscalía considera al acusado responsable de un delito de homicidio por imprudencia grave, tres delitos de lesiones por imprudencia grave, un delito de lesiones por imprudencia grave, un delito de conducción temeraria en relación con un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, un delito de conducción de vehículo a motor sin haber obtenido nunca permiso para ello, un delito de robo de uso de vehículo y un delito de quebrantamiento de condena del artículo. Concurren las agravantes de reincidencia y de abuso de confianza.

Los hechos se produjeron sobre las tres y veinte de la mañana del 19 de noviembre de 2011. El acusado circulaba por la calle General Elorza de Oviedo con una furgoneta, a pesar de que nunca había sacado el carné de conducir. El vehículo era propiedad de un tercero.

Al llegar al cruce de la calle General Elorza con la Avenida de Pumarín y Foncalada, el acusado, que circulaba a una velocidad excesiva e inadecuada, no respetó el semáforo que regulaba la circulación, que se encontraba en rojo para su sentido y, en lugar de detenerse, continuó con la marcha, arremetiendo contra la parte lateral derecha de un taxi, que iba correctamente, procedente de la Avenida Pumarín, en dirección a la calle Foncalada. En el accidente falleció un hombre de 27 años, pasajero del taxi, y otras cuatro personas resultaron heridas.

Tras el accidente, la Policía Local de Oviedo, observó que el acusado presentaba equilibrio balanceante, movimientos lentos, lentitud de reflejos, rostro sudoroso, ojos brillantes, olor a alcohol en el aliento y lenguaje repetitivo y confuso, por lo que, tras trasladarlo al hospital para que fuera atendido de las lesiones que presentaba, le realizaron con su consentimiento la prueba de alcoholemia. El test arrojó un resultado de 0,52 miligramos de alcohol por litro de aire espirado a las 7.58 horas y 0,51 miligramos de alcohol por litro de aire espirado a las 8.22 horas.

A consecuencia del siniestro se produjeron daños en el taxi (resultó siniestro total), en la valla de protección de peatones situada en la confluencia de las calles General Elorza y Foncalada (propiedad del Ayuntamiento de Oviedo) y en la furgoneta que conducía el acusado (siniestro total igualmente). El dueño de este último vehículo denunció que el acusado se lo había robado, aprovechando la circunstancia de que trabajaba para él y residía en una vivienda de su propiedad.