Los tumores de cabeza y cuello tienen una incidencia en Navarra de entre 140-145 pacientes cada año, de los que aproximadamente el 80 por ciento reciben tratamiento con radioterapia (116 pacientes en 2012), siendo los más frecuentes los de laringe.

Pamplona es la sede este viernes y este sábado de un curso nacional sobre el tratamiento de radioterapia (RT) en tumores de cabeza y cuello (TCC), al que asisten 45 oncólogos de toda España con el objeto de adquirir formación específica en la delimitación mediante imagen de los TCC, para un óptimo diseño y planificación de tratamientos radioterápicos, con el fin de evitar en lo posible los efectos secundarios de estas terapias (afectación de piel y tejido sano).

Se trata del III Curso de Planificación/Contorneo de tumores de cabeza y cuello, dirigido fundamentalmente a especialistas en oncología radoterápica y a médicos en formación en esta especialidad. El curso está dirigido por el doctor Fernando Arias de la Vega, oncólogo del Complejo Hospitalario de Navarra.

145

Casos cada año en navarra

Los tumores de cabeza y cuello incluyen los carcinomas de la cavidad oral, faringe, laringe, y los más infrecuentes de la cavidad nasal, senos paranasales y glándulas salivares. Se puede decir que, globalmente, suponen el 5 por ciento de todos los tumores. En Navarra estos tumores tienen una incidencia de entre 140-145 pacientes cada año, de los que aproximadamente el 80 por ciento reciben tratamiento con radioterapia (116 pacientes en 2012), siendo los más frecuentes los de laringe.

Los dos tratamientos fundamentales en los TCC son la radioterapia y la cirugía; en tumores precoces, ambos son tratamientos curativos y la elección de uno u otro depende de la localización del tumor y de las secuelas esperables. En tumores avanzados, el tratamiento puede incluir la cirugía seguida de radioterapia, generalmente con quimioterapia. En tumores inoperables o cuya cirugía conlleve grandes mutilaciones, en general es preferible un tratamiento conservador del órgano, como la laringe, basado en radioterapia y quimioterapia.

Por lo que se refiere a la prevención, en la mayoría de los TCC están implicados factores ambientales, como el tabaco y el alcohol, por lo que la eliminación de este tipo de hábitos es determinante para la reducción de la incidencia de los TCC, ha informado el Gobierno foral en un comunicado.

En la actualidad, las investigaciones en este campo se dirigen hacia la identificación de los factores moleculares pronósticos y factores predictivos de respuesta a los distintos tratamientos que permitan individualizar los mismos. También se están estudiando los factores que influyen en la toxicidad de los tratamientos que, aunque pueden ser curativos, a menudo lo son a costa de efectos secundarios, tanto agudos como crónicos, que pueden afectar a la calidad de vida de los pacientes.

PAMPLONA,

Sede del curso por segunda vez

De las tres ediciones del curso celebradas hasta el momento, dos han tenido lugar en Pamplona (2009 y 2014). Está incluido en los cursos oficiales de la EEOR (Escuela Oficial de Oncología Radioterápica) y ha sido declarado de Interés sanitario por el Departamento de Salud. Su organización ha corrido a cargo del servicio de Oncología Radioterápica del CHN, con la colaboración del servicio de Radiofísica Hospitalaria, también del CHN. El profesorado lo componen 11 especialistas de gran experiencia, referentes en el campo de la oncología radioterápica, cuatro de ellos del CHN (Fernando Arias; Gemma Asín; Andrea Burguete y Fernando Mañeru) y uno de la CUN (Marta Moreno).

Los contenidos del curso son eminentemente prácticos, repartidos en dos sesiones: la primera, un recordatorio de fundamentos teóricos y avances en el tratamiento de los TCC, y la segunda, totalmente práctica, en la que los participantes planifican los tratamientos de RT de casos reales de pacientes con TCC de localización más frecuente. Las sesiones se imparten en el pabellón de Radioterapia del CHN.