La devolución de este préstamo se adaptará cada año al nivel de ingresos del joven, de modo que si un año gana menos de 22.000 euros o se queda en paro, dejará de devolver el crédito.

Si 15 años después de haberse graduado no ha conseguido llegar a ese nivel de renta, la deuda quedará automáticamente extinguida, según Educación.

El objetivo de este plan de préstamos ligados a una renta futura, que ya se utiliza "con éxito" en países comunitarios, es elevar el nivel de educación de los ciudadanos, "un requisito imprescindible para el desarrollo económico y para la igualdad social", según el Ministerio de Educación.

La titular del Departamento, Mercedes Cabrera, informará al Consejo de Ministros de este plan que se pondrá en marcha a partir del próximo curso.

A partir del próximo curso

El plan consistirá en unas ayudas en las que el Estado prestará al joven graduado un dinero que no deberá devolver antes de los dos años y siempre que gane un mínimo de 22.000 euros.

Según el Ministerio, la cuantía del préstamo será suficiente para pagar los estudios y gastos personales del estudiante y no tendrá intereses para el receptor.

El estudiante recibirá en su cuenta bancaria un primer ingreso de 6.000 euros y unos pagos posteriores de 800 euros al mes durante un máximo de 21 meses y siempre durante el periodo de vigencia de la matrícula.

Estos préstamos ligados a la renta están dotados con 50 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado para 2007, lo que permitirá conceder, al menos, 6.000 préstamos en el curso que viene (2007-08).

Los interesados podrán pedir estas ayudas a partir del próximo 1 de septiembre, siempre que sean españoles, de la UE, o estudiantes que acrediten su condición de residentes.