El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha solicitado una reunión de la comisión de seguimiento del pacto entre CC y PSOE a escala regional para que los socialistas "clarifiquen" su posición sobre la venta de los casinos de la isla.

"Sin querer hacer sangre, a veces no sabemos a quien llamar en el PSOE para determinados temas", ha señalado en una entrevista concedida a la 'Cadena Ser' y recogida por Europa Press.

Alonso ha señalado que frente a la Ejecutiva Insular del PSOE, que ha pedido la paralización de la venta del casino de Playa de Las Américas, el grupo insular del Cabildo ha votado varias veces a favor, y también lo han apoyado el alcalde de Adeje, la Consejería de Presidencia del Gobierno de Canarias y el secretario insular, Manuel Fumero, "que dijo que respaldaba la posición del grupo".

Aunque la venta de los casinos está incluida en el pacto de gobierno, Alonso no cree que vaya a haber una "división" que afecte a los "elementos fundamentales" del Gobierno insular.

El presidente insular ha justificado el proceso de venta por las pérdidas de tres millones de euros de la sociedad, al tiempo que ha reconocido que los beneficios en el de Playa de las Américas son bajos.

Incluso, ha apuntado que el Casino Taoro, en Puerto de la Cruz, va a cerrar en pérdidas este año, "y eso obligará a liquidar por ley, según la última reforma del PP, lo que supone despedir a 60 trabajadores de la sociedad".

Una deuda de 20 MILLONES

Por eso, ha dicho que en los pliegos se ha incluido la subrogación de plantilla y el mantenimiento de las condiciones laborales por un periodo de cuatro años, y ha subrayado que, si no culmina el proceso, el Cabildo tendría que hacer frente a una deuda de 20 millones.

Asimismo, ha pedido "coherencia" al PSOE de Tenerife dado que muchos de sus ayuntamientos tienen privatizados servicios públicos, y también a UGT Canarias, cuyo secretario general, Gustavo Santana, defiende a los trabajadores del casino de Playa de Las Américas y su organización hizo una "destrucción de empleo" con un ERE que eliminó 30 puestos de trabajo.