Los Juzgados de Baleares redujeron un 10,1 por ciento sus asuntos pendientes durante 2013, situándose en un total de 68.990 causas por resolver frente a los 76.775 registrados el año anterior, según la Memoria correspondiente al ejercicio pasado presentada este viernes por el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB), Antonio Terrasa.

Más en concreto, por órdenes jurisdiccionales, en lo civil se vieron disminuidos los asuntos pendientes un 14,7 por ciento (hasta los 32.680); un 10,6 por ciento en lo penal (hasta los 30.923); un 10,2 por ciento en lo contencioso-administrativo (hasta los 4.029) y un 13,7 por ciento en lo social (9.143).

Sobre esto, Terrasa ha destacado que el tiempo que sería necesario para eliminar toda la pendencia si no se registrasen más casos nuevos sería de un año y medio en lo contencioso y social, cinco meses en lo civil y tres meses en lo penal.

Los datos reflejan asimismo un descenso en los casos registrados del 4,4 por ciento, al pasar de 228.876 en 2013 a los 218.768 ingresados el año pasado. También ha disminuido la capacidad resolutiva en un 4,42 por ciento, tal y como ha explicado Terrasa.

En su comparecencia, el presidente del TSJIB ha apuntado a las dificultades que atraviesan determinados órganos judiciales del archipiélago, como los Juzgados de lo Contencioso-administrativo o los de lo Social. Más en concreto, estos últimos, en el partido judicial de Palma (cuatro juzgados), han visto incrementar su cifra de asuntos en tramitación al acabar el año en un 10,09 por ciento.

En base a estos datos, Terrasa ha apelado a la necesidad de crear nuevos órganos judiciales, en función de la carga anual que prevé el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Tal y como ha estimado, Baleares necesita trece nuevos magistrados, y más en concreto uno para la Sala de lo Social del TSJIB; tres para las secciones penales de la Audiencia de Palma; cuatro para los juzgados de Primera Instancia (tres para Palma y uno para Ibiza); uno para el Juzgado de lo Penal número 8 (ejecutorias penales); uno para los juzgados de lo Contencioso-Administrativo; dos para los de lo Social de Palma y una nueva plaza para Mercantil.

Unas cifras a las que, ha subrayado Terrasa, habría que sumar, los refuerzos "para resolver situaciones coyunturales que están atravesando determinados órganos judiciales, como algunos juzgados de Instrucción de Palma o los de lo Contencioso-Administrativo".

En el caso de Menorca, en el partido judicial de Mahón, los tres juzgados de Primera Instancia e Instrucción han reducido sus cifras de asuntos pendientes tanto en el orden civil como en el penal, circunstancia a la que ayuda el menor número de casos registrados. En Ciutadella, se registra asimismo una bajada de procedimientos de entrada. Sin embargo, aumenta la pendencia en sus dos juzgados en el ámbito penal.

Por su parte, los cuatro juzgados de Primera Instancia de Ibiza ven aumentar en un 10 por ciento los asuntos que entraron en 2013. Aun así, aumenta la capacidad resolutoria y disminuye la pendencia. Su módulo de trabajo está por encima de lo establecido por el CGPJ. En cuanto a Instrucción, aumenta el número de casos pendientes al finalizar la anualidad.