El presidente del Consell Valencià de Cultura (CVC), el profesor Santiago Grisolía, ha defendido este jueves la actividad editorial de la institución, que "no es un lujo prescindible porque es uno de los canales de expresión de la institución y porque nada más la administración pública puede y debe hacerse cargo de editar ciertos libros imprescindibles pero de poco probable éxito comercial".

Así se ha pronunciado Grisolía durante la presentación de dos nuevas publicaciones de la institución, una biografía de Mauro Guillén, director médico de Fontilles, realizada por Juan Bautista Codina Bas, así como una antología de los textos del obispo ilustrado Josep Climent con un estudio a cargo de Marc Adell y Francesc Tort, ha informado la entidad en un comunicado.

El dermatólogo Mauro Guillén (Valencia 1876-1932) estuvo vinculado desde su origen al sanatorio de Fontilles como director médico y es uno de los grandes nombres de la historia valenciana de la medicina. Por su parte, el obispo Climent (Castellón de la Plana 1706-1781), fue, en palabras de Mayans i Ciscar, "el mejor de los ilustrados valencianos".