Autoridades de Brasil, Méjico y el Instituto Natura participan en unas jornadas celebradas en Sevilla con la finalidad de conocer el funcionamiento de la Red Andaluza de Comunidades de Aprendizaje, una iniciativa puesta en marcha por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía en el año 2012 dirigida a la mejora de los resultados escolares y de la convivencia.

Durante el encuentro, que se desarrolla durante los días 2 y 3 abril, los participantes han visitado centros educativos donde se están desarrollando estos proyectos para así poder conocer su realidad. Además, otro de los objetivos de las jornadas es explicar la implantación y constitución de la Red Andaluza, así como el impulso provocado tras las publicación de la norma que la regula, ha precisado la Junta en una nota.

También se analiza la labor de la Universidad y de la Agencia Andaluza de Evaluación Educativa en la difusión de sus buenas prácticas. En la actualidad, la red está integrada por 43 centros docentes en Andalucía y 31 nuevos centros han presentado proyectos en la convocatoria que acaba de finalizar.

Una 'comunidad de aprendizaje' es un proyecto de transformación social y cultural de un centro educativo y de su entorno encaminado a la mejora de los resultados escolares y de la convivencia, así como a lograr el éxito educativo de todo su alumnado. De este modo, se convierte en un centro abierto a la participación activa de las familias, asociaciones y voluntariado, tanto en sus procesos de gestión como en los del desarrollo del aprendizaje del alumnado.

El planteamiento pedagógico de una 'comunidad de aprendizaje' es favorecer desde la escuela el cambio social, disminuir desigualdades y combatir situaciones de riesgo de exclusión. Para ello se movilizan todos los recursos del entorno, favoreciendo la colaboración y participación de entidades públicas y privadas y de los agentes sociales de la comunidad.

Se propone un nuevo modelo de organización escolar, más abierto, plural y participativo, en el que el aprendizaje no recae exclusivamente en el profesorado sino que la educación depende de la implicación de familias, asociaciones del barrio o voluntariado. La cooperación y la solidaridad son el fundamento de la transformación social que se impulsa desde la escuela.