El consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Manuel Jiménez Barrios, ha calificado de "falsos" todos los "ataques" que se están lanzando contra la Junta sobre la prórroga del concierto sanitario con José Manuel Pascual Pascual, S.A., reiterando que la propuesta a la empresa implica una rebaja del cinco por ciento, "tal y como está haciendo la Administración con la sanidad pública". Esto supone pasar de los 104.460.000 euros al año a los 95.120.000 euros, "sin cierre de ningún centro ni menoscabo de ningún servicio de los que actualmente presta".

Así lo ha indicado el consejero durante un desayuno informativo del Grupo Joly celebrado en Cádiz, donde ha enfatizado que la Junta "no pretende cerrar ningún hospital, ni en la provincia de Cádiz ni en ninguna otra". Asimismo, ha señalado que la prórroga no es de cuatro años porque "no hemos llegado a un acuerdo", habiéndose prorrogado durante el año que permite la ley "para darnos tiempo para hablar".

Incide en que "no esconde ninguna estrategia de cierre de ningún hospital ni de menoscabo de ningún empleo" y ha reprochado al empresario que "lo lógico" es que él fuera el interlocutor con la Administración, en lugar de hacerlo "a través de los trabajadores".

En este sentido, subraya que los "ataques" que se están lanzando contra la Junta "no responden a la verdad", calificando de "falso" que la Junta pretenda cerrar el Hospital de San Rafael de Cádiz —de Pascual— en beneficio del de San Carlos en San Fernando.

Asimismo, ha hecho un ofrecimiento a la empresa para que, "si quiere ser transparente", aborde estas cuestiones con la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, "con luz y taquígrafo".

Por último, ha destacado que es "voluntad" del Gobierno andaluz llegar a un acuerdo con la empresa, lo que considera "imprescindible", siempre primando el beneficio de los trabajadores y del servicio que supone la asistencia sanitaria para la población.