El hombre que el viernes presuntamente mató a navajazos a su esposa en el distrito barcelonés de Sant Martí ha sido arrestado este lunes por la mañana en Jaén por la Guardia Civil. Los Mossos d'Esquadra le buscaban desde el viernes por la mañana, según ha informado la policía catalana.

Era el principal sospechoso pues desapareció tras el crimen, el quinto por violencia machista sucedida en Cataluña en lo que va de año. Al parecer, hacia las seis de la mañana, el agresor, de 56 años, subió el volumen del televisor para ahogar los posibles gritos de la víctima, de 53, o el ruido que pudieran hacer.

Precisamente, el volumen de la televisión despertó al hijo menor de la víctima, de 22 años, cuatro horas después y fue entonces cuando halló el cuerpo en el domicilio familiar, en la calle Bolivia. "La ha matado mi padre", dijo a los periodistas. Tanto él como sus hermanos y algunos familiares y vecinos la habían animado a dejarlo porque era muy celoso y se discutían constantemente.

De hecho, la policía catalana ya le arrestó en 2012 por haber amenazado de muerte a su mujer, quien se negó a denunciarlo y no acudió al juzgado para declarar. Fueron los vecinos quienes alertaron a los Mossos de una disputa en la calle y el juez archivó el caso sin adoptar ninguna medida cautelar, ni orden de alejamiento para proteger a la mujer.

El juzgado que investiga el crimen mantiene el secreto de sumario en relación con el caso, a la espera de tomar declaración en las próximas horas al presunto homicida.