En diciembre de 2004, las cadenas estatales TVE, Antena 3, Tele 5 y Sogecable firmaron un compromiso para proteger a la audiencia infantil en los horarios más sensibles.

Un par de años después, el Código de Autorregulación de Contenidos Televisivos e Infancia, salvo la honrosa excepción de La 2, es vulnerado a diario.

El Observatorio de Contenidos Televisivos y Audiovisuales (OCTA) denunció ayer que desde la suscripción del código, las parrillas de estas cadenas no han sufrido modificaciones dignas de mención y siguen emitiendo contenidos inadecuados.

Los encargados de vigilar esta parrilla han puesto mayor atención en el horario vespertino denominado de superprotección del menor, el que va de las 17.00 a las 20.00 h.

En esta franja, cuando la mayoría de los escolares vuelven a casa y meriendan, es en la que mayor incumplimiento ha observado el OCTA.

Tres horas intensas

Durante tres horas se suceden en antena realities y magacines como A tu Lado (Tele 5), En Antena o El Diario de Patricia (Antena 3), Juicio de Parejas (La Sexta) o Channel nº 4 (Cuatro).

Gracias a ellos, desfilan ante los ojos de los menores discusiones con lenguaje poco apropiado e insultos, escenas violentas, etc.

Aunque las quejas recibidas afectan a todas las cadenas, dos se llevan la palma. Son Antena 3 y Tele 5 y sus programas de media tarde que, desde que han incorporado las pruebas del polígrafo o máquina de la verdad han visto incrementadas sus quejas.

Cada niño de entre 4 y 12 años pasa casi 4 horas diarias frente a la televisión, según la confederación de consumidores CEACCU y la ley protege al menor de seis de la mañana a diez de la noche, aunque no se cumple.

Ángeles Pérez, integrante del OCTA, pidió ayer al Gobierno que "vigile y sancione, o cree un consejo del audiovisual independiente que castigue este tipo de emisiones".

Un deber del Gobierno

La Constitución limita los derechos de expresión, opinión e información en la protección a la infancia.

En octubre de 2004, la vicepresidenta De la Vega se reunió con responsables de las televisiones y dos meses después firmaron su código de autorregulación.

Sin embargo, el OCTA recuerda que hoy nadie vela por su cumplimiento y, aunque la ley establece sanciones, el Gobierno no se encarga de imponerlas.

Arturo Canalda, defensor del menor de la comunidad de Madrid: "Se debe hacer cumplir la ley"

Es muy importante destacar que es la propia sociedad civil quien está denunciando estos problemas con los contenidos televisivos. Debemos proteger a los menores para garantizar que no estén sometidos a imágenes inapropiadas en horario de superprotección, como las de los últimos días de niños maltratados en guarderías que han salido en los programas de la tarde.

Para conseguirlo, se debe concienciar, primero a las empresas y después a la sociedad, de que es algo que debe ser corregido. El Estado debe regularlo y se debe hacer cumplir la ley con sus correspondientes sanciones.

Todo va en función de las audiencias de los programas. Si éstas son altas, las empresas no los van a retirar porque las sanciones actuales son mínimas y no tienen ningún problema en pagar cantidades ínfimas a cambio de mantenerlos en antena. No obstante, éste también es un problema que los padres deben ayudar a solventar.

No toda la responsabilidad debe recaer sobre ellos, pero junto con los educadores deberían trabajar por solucionarlo.

Y ellos, ¿cómo lo ven?

17.45 h.‘A tu lado’. Presentado por Emma García. Incluye máquina de la verdad, tensos debates entre ex concursantes de Gran Hermano y gira en torno al mundo del corazón.

Valeria y Sergio. 5 y 31 años.

"Sólo ve los dibujos".

"La niña sólo ve los dibujos animados del canal por cable de Disney", confiesa Sergio. Valeria asiente con la cabeza mientras sujeta un cuento de esta firma y asegura que "mi preferida es Hannah Montana".

Sergio dice que tuvo la suerte de vivir en un edificio donde "la antena de la televisión es muy mala", lo que salva a la niña de ver los programas de media tarde.

Carmen y Carmen. 40 y 10 años.

"No me gusta ese programa".

Alguna vez ha visto con su cuidadora "ese programa en el que la gente se conoce", aunque Carmen confiesa "que no le gusta".

Ella prefiere hacer los deberes cuando llega del colegio y, si pudiera, después ver los dibujos animados. A su madre tampoco le gusta el programa de Patricia, "por lo que alguna vez tuve que avisar a la cuidadora".