El presidente de la Confederación de Comercio de Madrid (Cocem) y candidato a la Presidencia de la Confederación de Empresarios de Madrid (CEIM), Hilario Alfaro se presenta muy crítico con la labor de su principal contrincante en los comicios, Arturo Fernández. Las de este lunes son las primeras elecciones con dos contricantes en los 36 años de historia de la institución.

¿Por qué se presenta?

Hace falta una regeneración, que entre aire fresco. Es la primera vez en toda la historia de la democracia en la que hay dos candidatos en la CEIM, porque siempre ha sido 'quítate tú para ponerme yo'. El otro candidato no puede cumplir mi programa y no ha cumplido el suyo en los 8 años que lleva. Ofrece lo mismo.

Su programa habla de transparencia. ¿Es opaca la CEIM?

Hemos perdido nuestros valores originales de independencia, la transparencia, la eficacia, la utilidad y el liderazgo de los problemas y de las soluciones durante la presidencia de Arturo y, antes, durante la de su concuñado, Gerardo Díaz Ferrán.

¿Ha perjudicado a la organización el hecho de que a Arturo Fernández se la considere un consejero más del gobierno del PP en Madrid?

El presidente no cumple los principios de CEIM. Yo ya los he cumplido en las organizaciones que he encabezado antes como Acotext. Allí apliqué la limitación a 8 años de mandato y las auditorías internas, por ejemplo.

¿Qué ofrece a los empresarios?

Primero, recuperar la independencia política y económica. Tenemos que marcar el camino a los políticos, porque somos los que conocemos los problemas, y no al revés.

¿Cuáles son los mayores problemas?

El primero, la falta de financiación. Los acuerdos bancarios empiezan y terminan en la foto que se hace para publicitarlos. No estamos dispuestos a hacernos más fotos si el dinero no llega a las empresas. Hay que forzar a los bancos nacionalizados, a los que hemos ayudado con nuestro dinero, a prestar dinero a las familias y a las empresas.  Hay que ver cómo poner a trabajar a los 548.000 parados que tenemos en la Comunidad.

¿Qué hacemos con el sector industrial, que ha sufrido una debacle?

La industria ha sido la gran olvidada. Representa el 9,2% del PIB cuando Europa nos ha dicho que debería significar el 20% en muy poco espacio de tiempo. Desde 2008 se han perdido 3.468 factorías, 46.000 puestos de trabajo, cuando los servicios representan el 85% del PIB. Eso demuestra que necesita un plan de choque urgente.

¿Y con el turismo? Ayuntamiento, Comunidad y CEIM dicen que hay un plan de choque...

(Interrumpe) No hay ningún plan de choque. Se veía venir, estaba cantado que nos iba a pasar esto y que el turismo iba a desplomarse. Pedimos un organismo único sin protagonismos ni vanidades, que sea dirigido por profesionales y no por políticos. También, un presupuesto único donde cada agente aporte lo que pueda económicamente. Y un solo plan estratégico a largo y medio de plazo que supere el hecho de que en un año y medio hay elecciones. Algo a medio y largo plazo con el compromiso de todos los partidos. Eso es lo que hacen otras comunidades y otras ciudades europeas que nos están ganando la partida. Estamos dispuestos a aprender y a copiar del que lo haga bien. Barcelona, por ejemplo, lo hace así. Aquí, en vez de facilitar el rodaje de películas y anuncios para que hagan de escaparate, sino que les ponemos todas las trabas del mundo.

Los empresarios siempre quieren pagar menos impuestos. ¿Tantos se abonan?

Somos de los países que más penalizamos la creación de empleo a través de las cotizaciones sociales. Madrid es de las regiones con menor carga fiscal y felicitamos al presidente Ignacio González por ello, pero el gobierno central tiene que bajar las cotizaciones y el resto de los impuestos. A menos impuestos, más creación de empleo y más recaudación.

¿Y cómo financiamos los servicios públicos?

Adelgazando el monstruo de Estado que tenemos y el gasto en él, en lugar de exprimirnos más. Los servicios públicos son necesarios, no nos referimos a recortarlos porque el bienestar del país pasa por la Sanidad y la Educación, sino al gasto de la maquinaria.

Igual se ha vendido mal la figura del empresario. Sufrimos para llegar a fin de mes y pagar las nóminas y los impuestos, sufrimos cuando tenemos que despedir a una persona y sufrimos cuando cerramos una empresa. Arriesgamos nuestro patrimonio. Somos generadores de empleo y de riqueza. Somos más infinitamente solidarios de lo que parece.

Tampoco ayudan el encarcelamiento del ex presidente de CEIM Díaz Ferrán, la imputación de Arturo Fernández en el 'caso Bankia' o la detención de Alfonso Tezanos, miembro de la Ejecutiva de CEIM, por el caso de los cursos de formación.

No, desde luego no hemos proyectado la mejor imagen. Si estuviese en el lugar de ellos, yo no me presentaría a unas elecciones, pero al 99,9% de los empresarios hay que reconocerles el mérito de estar sacando esta situación adelante.

Arturo Fernández le ha acusado públicamente de ensuciar el proceso electoral.

Debería buscar en su propia gestión en lugar de buscar enemigos en otras candidaturas. Quienes están en los titulares de prensa negativos son los que     empañan el nombre de CEIM, No debería culparme a mí ni a la prensa.

¿Es transparente la gestión de los cursos de formación?

No se puede culpar a todas las empresas de formación porque haya un garbanzo negro. La imagen de CEIM se está viendo perjudicada, por eso pedí que se tomasen medidas para aclarar cuanto antes lo que ha ocurrido.

El empleo precario (menos horas, contratos parciales) se extiende. ¿No se puede crear empleo de calidad?

El empleo dignifica. Si lo pierde, esta se ve afectada. Más vale un empleo con unas condiciones mínimas en la situación en la que estamos que ninguno. No podemos rechazar ese puesto porque no sean las condiciones de hace 5 o 10 años. Las cosas evolucionan para adelante o para atrás dependiendo el momento. LA reforma laboral ha servido para frenar el ascenso del paro, pero no para crearlo. Reducir 47 tipos de contrato a los cuatro de hoy, que son los que ya utilizábamos, no es una reforma. Tenemos que echarle imaginación en la contratación. Si se bonifican las cotizaciones te garantizo que se contratará más. Y eso es devolver la dignidad a los parados.

Entre sus propuestas está que el presidente de CEIM no pueda serlo de la Cámara de Comercio, como sí ocurre ahora. ¿Por qué?

Son organizaciones distintas con una financiación distinta y misiones distintas. Tiene que trabajar de forma leal y de la mano para mejorar el tejido empresarial. La presidencia compartida hace que no funcionen ni una organización ni la otra.

También se compromete a no entrar en consejos de administración, a no establecer lazos comerciales entre la CEIM y sus empresas...

Debemos aprender de los fallos cometidos en las últimas presidencias. Arturo Fernández, por ejemplo, cobró en su último año en Bankia 278.000 euros, según el informe del Banco de España. Ese dinero nunca llegó a la organización. Si me veo obligado a entrar en un consejo por razón de mi cargo, el dinero irá a la CEIM. La única forma de trabajar es siendo independiente. Yo tengo de vivir de mi negocio, que me va bien y me divierte. Mientras, trabajaré por y para la organización. No vengo a hacer negocio con ella. Vengo como representante del comercio de Madrid, con 90.000 empresas y 270.000 trabajadores. Ellos son CEIM. Yo soy CEIM. CEIM somos yo y esta candidatura.

¿Si gana las elecciones el 24, cuál será su primera decisión?

Sentarnos con todo el equipo técnico de CEIM, con el que contamos íntegramente, trasmitirles la ilusión del proyecto, tranquilizarles por este período electoral y llamar a las administraciones y a los agentes sociales.