La Policía Nacional ha desarticulado una organización dedicada al tráfico de hachís tras la detención este pasado martes de cinco personas, cuatro de ellos hombres de nacionalidad marroquí y una mujer española, y el registro de tres viviendas, dos de ellas en Mérida y la otra en Almendralejo.

Asimismo, en la operación han sido incautadas 251 "bellotas" de hachís, que suman un peso total de 2.510 gramos, además de 2.030 euros en efectivo, el vehículo del cabecilla y 11 teléfonos móviles.

La investigación, llevada a cabo por agentes adscritos a la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Local de Mérida, comenzó tras tener conocimiento de la presencia en esta localidad de personas dedicadas a la venta de grandes cantidades de hachís a otros traficantes.

Según indica la Policía Nacional en una nota de prensa, los implicados estaban "perfectamente estructurados y con roles de actuación diferenciados". De esta forma, el cabecilla, de nacionalidad marroquí, era el que gestionaba la entrada del hachís.

Lo hacía con la colaboración de jóvenes conciudadanos que, o bien transportaban la droga escondida en bolsas y equipajes, o bien la ingerían, expulsándola posteriormente en el domicilio de otro miembro de la organización, también marroquí. Posteriormente la droga era distribuida a otros traficantes, que se encargaban de la venta final al consumidor de estas sustancias.

Los agentes actuantes llevaron a cabo numerosas vigilancias discretas en los domicilios de estas personas: dos pertenecientes al cabecilla de la organización, sitos en Mérida y Almendralejo, y otro más en la capital autonómica, adquirido por otro de los detenidos, miembro de la organización, a los simples efectos de servir para que las "mulas" defecaran las "bellotas" ingeridas.

Las detenciones tuvieron lugar este pasado martes. Entre ellos se encontraban dos "muleros" que días antes habían defecado en el domicilio que el grupo tenía para tal fin el hachís intervenido, así como las dos personas que vivían en dicha vivienda y el cabecilla de la organización.

Los detenidos, que han sido acusados de un delito contra la salud pública, concretamente por tráfico de drogas, son cuatro hombres de nacionalidad marroquí y una mujer española, de entre 25 y 42 años de edad, con antecedentes, quienes tras la instrucción del pertinente atestado fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, decretando ésta el ingreso en prisión de los cuatro varones.