Conocido gracias a La hora chanante, Muchachada Nui y el recientemente desaparecido Torres y Reyes, el cómico Joaquín Reyes es la nueva incorporación de El Intermedio (La Sexta), con su admirado, lo ha reconocido en varias ocasiones, Wyoming. Según cuenta Reyes su labor en este espacio más que consolidado consiste en dar un toque diferente al programa: un humor distinto, más surrealista y absurdo.

Ha dicho muchas veces cuánto admira a Wyoming y ahora está en El Intermedio, ¿qué tal en las distancias cortas?

Halagado porque es un programa que no necesita a nadie más, funciona muy bien, así que el hecho de que pensaran en mí me ha halagado. Y él hace fácil lo difícil: ser gracioso y tener credibilidad.

Si es un tren en marcha, ¿qué aporta usted?

Intento dar una visión más surrealista y absurda, un humor de otro tipo.

¿Es usted consciente de que El Intermedio es casi un informativo para mucha gente?

Claro. Es que Wyoming y Sandra hablan de actualidad y han dicho cosas que la gente no se atreve a decir. Hay un criterio y hay noticias que son reales y además es escrupuloso. La gente está cansada de las versiones oficiales y del miedo a los políticos.

Poco le duró el 'paro', ¿qué pasó con Torres y Reyes?

A Mara no le pusieron las cosas fáciles en la cadena, ésta es mi versión personal, ¿eh? Y si ella no seguía  pues dije que yo tampoco.

¿Y eso por qué?

Porque  si hubiera sido otro programa diferente sí, pero el mismo sin ella, no. Mejor que cambie todo. Los que están ahora lo hacen muy bien, los adoro. Y además así se evitan las comparaciones.

¿Cansa moverse siempre en el mismo registro cómico?

Me gusta. Tengo un compromiso con la comedia, estoy casado con ella. Siempre he hecho humor y es lo que me gusta. Ni como espectador veo mucho drama.

¿A nivel personal tampoco cansa?

El fan te ve como un colega y eso es lo bueno, que les gustaría tomarse una caña contigo. Luego ya, en la vida personal, pues tienes de todo... Estás comprando yogures y de repente te dice alguien: mira qué gracioso, anda cuéntate un chiste.

Y la tele, ¿qué opinión tiene usted?

Te ofrece muchas cosas y puedes ver buenas series y programas de entretenimiento. Quejarse de la tele, incluso de la telebasura, no tiene sentido, nadie te obliga a verla. Además, hasta lo que algunos llaman telebasura entretiene a alguna gente. La oferta es muy amplia.

¿Está seguro?

Otra cosa es que te gustaría que tu país fuera de otra forma, pero ése ya es otro debate.

Un país en el que por ejemplo el falso documental de Évole sobre el 23-F generó mucha controversia y enfado, ¿falta sentido del humor?

Me sorprendió el enfado. En este país, donde faltan tantos estímulos y todo es la versión oficial, se quejan cuando alguien hace algo diferente. ¿Qué es lo que fastidió, que se la metieran doblada? Es un país de una única versión. Hay mucho miedo y en cuanto se zarandea un poco... El humor siempre es sospechoso.