Detienen a tres personas por vender marihuana y hachís a menores en Sant Martí

  • Los Mossos y la Urbana vigilaron la zona porque había un piso sospechoso.
  • Los viernes y los sábados recibía muchas visitas de jóvenes.
  • En el registro encontraron droga, dinero y básculas de precisión.
Agentes de los Mossos y la Guardia Urbana de Barcelona, juntos por las calles de ciudad.
Agentes de los Mossos y la Guardia Urbana de Barcelona, juntos por las calles de ciudad.
ACN /ARCHIVO
Agentes de los Mossos y la Guardia Urbana de Barcelona, juntos por las calles de ciudad.

Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana han desmantelado dos puntos de venta de droga del distrito de Sant Martí de Barcelona y han detenido a tres personas que presuntamente suministraban marihuana y hachís a menores de edad, según han informado en un comunicado conjunto sendos cuerpos policiales.

El 7 de febrero se empezó a sospechar que en un piso de la Gran Vía se vendía droga, pues recibía muchas visitas de jóvenes, la mayoría menores de edad, especialmente los viernes y los sábados. Un dispositivo de vigilancia conjunto permitió constatar que no eran uno sino dos los pisos en los que se vendían estupefacientes.

Varios jóvenes fueron registrados y la mayoría llevaban droga encima, principalmente hachís y marihuana, y confirmaron que la habían comprado en un piso cercano. Los agentes denunciaron a varios de ellos por tenencia de estupefacientes, de los que cuatro eran menores de edad.

La madrugada del 6 de marzo, mossos y urbanos entraron y registraron los dos pisos sospechosos. En el primero encontraron 50 gramos de marihuana y más de medio kilo de hachís con un valor en el mercado ilegal de 3.500 euros. También hallaron básculas de precisión y 1.845 euros en billetes pequeños y repartidos por la vivienda. El hombre, con antecedentes policiales, y la mujer que vivían en dicho domicilio fueron detenidos.

En el segundo piso, encontraron 187,7 gramos de cannabis, con un valor en el mercado ilegal de 876 euros, así como 593 euros en billetes pequeños —también distribuidos por toda la vivienda— y una libreta con las personas a las que se había vendido droga, la cantidad y el importe cobrado. La policía arrestó al joven que vivía en el domicilio y que era hijo del matrimonio del otro piso.

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