Vuelven las baterías peligrosas: Lenovo retirará 205.000 por riesgo de incendio

  • El reemplazo de baterías será gratuito.
  • Esta retirada afecta a portátiles de la empresa japonesa Sanyo.
  • Sanyo ha explicado que el problema se debe a que han sufrido impactos y no a las baterías en sí mismas.

El fabricante de ordenadores chino Lenovo retirará 205.000 baterías para ordenadores portátiles fabricadas por la japonesa Sanyo por peligro de recalentamiento, anunció la compañía en un comunicado.

Lenovo advierte que por la seguridad de los propios usuarios es conveniente reemplazar estas baterías porque existe un peligro de recalentamiento de las mismas que puede acabar por incendiar los aparatos.

El reemplazo de las baterías afectadas será gratuito para los clientes, afirma la nota, que precisa que los aparatos afectados son los modelos R60 y R60e, T60 y T60p, Z60m, Z61e, Z61m y Z61p.

Se trata de la segunda retirada de baterías realizada por la compañía en los últimos seis meses. La anterior supuso el reemplazo de 100.000 baterías en Estados Unidos y 105.000 alrededor del mundo.

Sanyo se ha defendido señalando que las baterías están bien y que los problemas han sido causados por impactos externos sobre los aparatos, y que los incidentes por recalentamiento no han sido causados por las baterías en sí mismas.

La compañía japonesa precisó, sin embargo, que apoyaba las medidas de retirada adoptadas por Lenovo y que están tomando decisiones dirigidas a trabajar con la compañía para poner como primera prioridad la seguridad del consumidor.

2006: un año de sobrecalentamientos

Desde el pasado agosto, Dell, Apple, Lenovo e IBM, Hitachi, Toshiba y Fujitsu, y Sharp han ordenado la retirada del mercado de 7,74 millones de baterías fabricadas por Sony que emplean sus ordenadores.

Sony estima que el coste máximo de la operación de devolución de toda sus baterías podría ascender a unos 30.000 millones de yenes (199 millones de euros), sin embargo, la cifra se quedaría pequeña si compañías como Toshiba reclaman indemnizaciones por daños en sus ventas y en la imagen corporativa.

De hecho Sony se vio obligada a revisar a la baja sus previsiones de beneficios para el año fiscal en curso que finalizará el próximo 31 de marzo debido a este monumental fiasco.

Estos incidentes han acrecentado además la preocupación de Sony por su imagen, aunque no es la única empresa con este tipo de problemas.

También las baterías de portátiles de Panasonic, las de HP o las fotocopiadoras de Canon han tenido que revisarse o sustituirse por riesgo de incendio.

De hecho, y a raíz de estos incidentes, Panasonic ha comenzado a producir en masa baterías diseñadas especialmente contra los sobrecalentamientos.

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