La policía de Wloclawek fue avisada por una mujer de que su vecino había asesinado a una niña en la que, según afirmaba, reconoció a Satanás.

"La mujer que nos avisó añadió que había estado en la vivienda del vecino y efectivamente en el suelo yacía el cuerpo ensangrentado de una niña pequeña", informó la portavoz de prensa de la policía, Katarzyna Witkowska.

Cuando los policías llegaron al lugar del suceso encontraron el cadáver masacrado de la niña y al dueño e la vivienda, totalmente borracho, que repetía una y otra vez que había dado muerte al diablo.

"La mujer trató de convencernos de que en realidad no había pasado nada, porque el cuerpo que yacía en el suelo no era de una niña, sino de una muñeca", contaron los policías.

La víctima, Anna, de cuatro años, fue dejada por su madre con sus vecinos que se comprometieron a cuidarla, mientras la mujer estuviese en el trabajo.