El proyecto, desarrollado por la empresa Sistemas Genómicos y la clínica Quirón, facilitará «un mejor estudio de las enfermedades hereditarias», según el director de la Unidad Genética de la firma valenciana, Javier García Planells. El precio es de 200 euros, muy por debajo de lo que costaría almacenar este material en un banco privado, y la duración «puede ser eterna», siempre que «se purifique exhaustivamente el ADN», explica el doctor.

El proceso se inicia con una extracción de sangre en la clínica (previo consentimiento del interesado). Luego se trata en el laboratorio para que resista la temperatura ambiente, y finalmente se da la muestra a la persona para que la custodie ella misma o sus familiares.

La técnica puede tener varios usos. Desde conocer la clave para diagnosticar enfermedades hereditarias (cáncer o neurodegenerativas), hasta identificar a una persona de manera eficaz tras una catástrofe. Entre los grupos de riesgo están bomberos, policías, militares...

Para detectar si una enfermedad es o no hereditaria (como el cáncer), se toma primero una muestra del paciente y, si hay mutación genética, se analizan muestras de la familia, para ver si también la pueden tener.

Saber si un hijo es nuestro son 600 €

Una vez que tenemos el ADN guardado, nos queda saber qué hacemos con él. En el caso de las pruebas de paternidad, que son muy demandadas, los precios oscilan entre los 600 y los 900 euros, aunque varía en función de cada caso.

Dinos ... si guardarías tu propio ADN

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