Un borrador correspondiente a una auditoría de las cuentas de la sociedad gestora del mercado central hispalense, Mercasevilla, relativas al año 2013, —saldadas con pérdidas por valor de 3,6 millones de euros—, expone la "incertidumbre significativa" que pesa sobre la compañía en cuanto a su "capacidad para continuar con sus operaciones". Tal extremo deriva de la concatenación de ejercicios con "pérdidas de importe significativo" y las posibles "consecuencias" de los diversos frentes judiciales que afectan a la empresa.

Como habíamos informado, el consejo de administración de Mercasevilla, una empresa participada mayoritariamente por el Ayuntamiento hispalense y la sociedad estatal Mercasa, formuló este pasado miércoles las cuentas de 2013 con el voto favorable de sus socios mayoritarios y el abandono de PSOE e IU-CA, cuyos representantes habrían dejado la sesión por discrepancias con el sexto teniente de alcalde y presidente de la compañía, el concejal del PP Gregorio Serrano. Las fuerzas de oposición, no obstante, mostraron su rechazo al contenido de las cuentas.

El devenir económico de Mercasevilla durante el año 2013 estuvo marcado, como se recordará, por una ampliación de capital por valor de casi seis millones de euros, tres de los cuales fueron aportados por el Ayuntamiento, principalmente para afrontar el expediente de regulación de empleo (ERE) promovido en agosto con 129 despidos e indemnizaciones por importe de 1,96 millones de euros a los trabajadores afectados.

Este borrador de auditoría de cuentas, de cualquier modo, señala los diversos "procesos judiciales en curso" que afectan a Mercasevilla. En ese sentido, señala la investigación de la adjudicación a 'Sando Proyectos Inmobiliarios S.A.U.' de un derecho de opción de compra de los terrenos de la compañía, así como la "demanda de resolución de contrato" promovida por dicha empresa con su correspondiente "reclamación de daños y perjuicios". Además, da cuenta de la investigación relativa a los "planes de jubilación anticipada mediante pólizas de rentas colectivas" asociadas a los expedientes de regulación de empleo de 2003 y 2007, así como la impugnación del ERE promovido en agosto de 2013. Mercasevilla, según figura además en el documento, estaría promoviendo una "revisión" de determinados aspectos de los ERE de 2003 y 2007 merced a la información "puesta de manifestación" en la indagación de dichos procedimientos.

Las "consecuencias" de los conflictos

Insistiendo en que todos estos conflictos se encuentran "en curso", este borrador de auditoría de cuentas avisa de que "no resulta posible concluir sobre las consecuencias que pudieran derivarse de la resolución definitiva" de los procedimientos en cuestión.

Y es que la financiación del ERE de 2007 estaba cuantificada en 9.046.976,95 euros que diversas sentencias atribuyen exclusivamente a Mercasevilla, toda vez que respecto a los derechos de superficie obtenidos por 'Sando', figura en la auditoría de cuentas un "saldo a pagar" de 6.181.396 euros.

De cualquier modo, la auditoría de cuentas señala "pérdidas de importe significativo en los últimos ejercicios" y, como suma de todos estos aspectos, "una incertidumbre significativa sobre la capacidad de la sociedad para continuar con sus operaciones", si bien da cuenta del "plan de viabilidad" acordado en julio de 2013 con medidas como el expediente de regulación de empleo a través del cual la empresa se desprendió de 129 empleados y externalizará varios servicios a los que están ligados otros 39 trabajadores que también dejarán de forma parte de la plantilla directa de Mercasevilla. "La posibilidad de la sociedad para realizar sus activos está condicionada al éxito del mencionado plan de viabilidad", expone el documento.