El Consejo de Gobierno de Aragón ha tomado conocimiento este martes del anteproyecto de Ley de Comercio, que promueve el Departamento de Industria e Innovación. El documento prevé mantener los dos periodos clásicos de rebajas y apuesta por la ciudad compacta con el comercio de proximidad.

El anteproyecto se someterá a un proceso de participación ciudadana e información pública y, una vez se apruebe, conllevará la derogación de la ley actualmente vigente. El nuevo texto integrará las modificaciones que se han hecho a lo largo de estos años para adaptar la normativa autonómica a la estatal y europea.

El Ejecutivo autonómico analizará junto con todos los agentes implicados este anteproyecto, cuya aprobación requiere informes del Consejo Económico y Social, el Consejo Aragonés de Cámaras, las Cámaras de Comercio de Zaragoza, Huesca y Teruel, el Consejo Aragonés de Consumidores y Usuarios y el Observatorio Aragonés del Comercio. Esta ley se centrará en el ámbito administrativo de la actividad comercial y no entrará en cuestiones propias de la normativa mercantil.

Actividades excluidas

Así, se excluyen cuatro actividades del ámbito de la ley: servicios de reparación, empresas de ocio, ventas por fabricantes y ventas por parte de agricultores y ganaderos en sus instalaciones, en la medida en que no se realice una actividad usual de venta de productos al público.

Además, mantendrá el registro de actividades comerciales con fines de información, control y transparencia —no con finalidad habilitante— y establecerá normas para evitar que los comerciantes mayoristas ejerzan sin control actividades minoristas.

En cuanto a los establecimientos comerciales, el texto regula el concepto de establecimientos comerciales, distinguiendo entre los permanentes, los que no lo son, los colectivos y los individuales, así como el ejercicio de la actividad comercial sin establecimiento. En este sentido se regularán las ventas domiciliarias, a distancia, automáticas, y ambulantes, tratando de dar cabida a todas las que se dan en la realidad.

En lo referente al comercio electrónico y teniendo claro que es un fenómeno a potenciar y que supera los ámbitos territoriales y de capacidad de control por parte de la Administración autonómica, la ley se aplicará a los comerciantes ubicados en Aragón que ejerzan esta modalidad de forma complementaria a la tradicional.

REBAJAS

Además de introducir una referencia a los outlet y a la venta de productos de segunda mano, el texto legal opta por mantener los clásicos dos periodos de rebajas, a los que comerciantes y consumidores están acostumbrados, aunque posibilita ampliaciones para atender posibles periodos de crisis.

El anteproyecto recoge la figura del Plan General para el Equipamiento Comercial y los Planes Locales de Comercio que puedan desarrollarlo en zonas concretas como instrumentos fundamentales para ordenar las políticas públicas de fomento de la actividad comercial.

También plantea la realización de informes sobre planeamiento urbanístico, preceptivos y no vinculantes, que se pronuncien sobre nuevas zonas comerciales y la posible influencia que puedan tener sobre el municipio y su área de influencia.

En este sentido, el texto considera que el urbanismo debe atender la cuestión comercial, al objeto de conciliar la libertad en el ejercicio de esta actividad con la conservación de los pueblos y ciudades como espacios en los que el ciudadano pueda tener a su alcance los servicios que necesita, con un modelo de ciudad compacta en el que el comercio de proximidad siga estando presente.

Plan general

El Gobierno de Aragón trabaja en paralelo en la revisión del Plan General para el Equipamiento Comercial de Aragón, con el fin de hacerlo más eficaz para la promoción del sector y de adaptarlo tanto a la coyuntura económica actual como a los cambios normativos que se han producido en los ámbitos estatal y autonómico. Se trata del documento que establece las directrices para adecuar el equipamiento comercial a las necesidades de consumo y compra de los residentes en los distintos municipios y comarcas.

La segunda revisión del Plan General viene desarrollándose desde hace algunos meses con la participación también de los principales agentes que componen el sector. Entre las novedades que contiene esta revisión, que incide más en el ámbito de la promoción y fomento comercial que en el de la ordenación, se incluye un refuerzo al papel del Observatorio Aragonés del Comercio como órgano consultivo en relación con la política comercial de la Comunidad.

Se desarrollará mediante un plan de acción en el que se concretarán siete ejes de trabajo, programas y acciones. Para 2014, la dotación económica de todas estas líneas de fomento y promoción del comercio asciende a 4,2 millones de euros.