EDP ha puesto en funcionamiento este martes el gasoducto de transporte secundario Moratalla-Mula, que llevará directamente gas natural a 34.000 hogares de la Región y permitirá dar servicio a 75.000 personas.

Con la puesta en marcha de esta infraestructura, para la que se ha invertido un total de 16 millones de euros, el gas natural está ya disponible para el 93 por ciento de la población regional, que cuenta con 94.000 puntos de suministro y 1.610 kilómetros de redes de distribución de esta fuente de energía, según han destacado en la inauguración el presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel; y el presidente de EDP España, Manuel Menéndez, que dice que "el objetivo es llegar al 94 por ciento y que aún quedan proyectos por realizar".

Por ello, Valcárcel ha destacado el "gran avance" en el suministro de esta fuente de energía que supone esta infraestructura, situada la Estación de Regulación y Medida del Polígono Industrial de Marimingo de Bullas.

Esta instalación facilitará el suministro gasístico a través de un tramo del gasoducto con una longitud total de 64,2 kilómetros y capacidad para transportar un caudal de 17.500 metros cúbicos de gas por hora.

Por ello, no ha dudado en afirmar que la apuesta por esta infraestructura "es un ejemplo más de la preocupación de la Región de Murcia en materia de medio ambiente" y ha valorado el hecho de que suponga "una mejora en la vida de las personas".

La gasificación del eje del Noroeste comenzó en el año 2000 con la instalación de plantas satélite de almacenamiento de gas en los municipios de Mula, Bullas, Cehegín y Caravaca de la Cruz, a las que se incorporó en 2008 la planta de Calasparra. Además de por estas poblaciones, el trazado del gasoducto discurre por Moratalla, a cuyo término municipal llegará en breve.

Ahora, una vez finalizado el gasoducto, se podrán eliminar estas plantas satélite, lo que permitirá, según Valcárcel y Menéndez, "entre otros beneficios, evitar los más de 300 trayectos anuales que efectúan los camiones cisterna para abastecer dichas plantas", lo que conlleva ventajas logísticas, económicas y medioambientales por la consiguiente reducción de emisiones.

Plan de gasificación de la región 2004-2016

La construcción de esta infraestructura es fruto del convenio marco de colaboración suscrito entre el Gobierno regional y el Grupo EDP para el desarrollo de la gasificación en la Región de Murcia, por el que se invertirán un total de 62,4 millones de euros en la construcción de 345 kilómetros de gasoducto.

Este plan estableció tres objetivos clave: eliminar las 11 plantas de gas natural licuado existentes, de las que ya sólo restan tres en poblaciones todavía sin gasoductos; dotar de estas infraestructuras a las zonas del Noroeste, Altiplano y Sur; y hacer posible el suministro de gas natural al 94 por ciento de la población.

En los últimos diez años, se ha triplicado el número de kilómetros de las redes de distribución de gas en la Región y se ha duplicado el número de murcianos que disponen ya de esta fuente de energía.

Dentro de este plan, ya se está suministrando a los municipios de Lorca, Alhama de Murcia, Totana, Fuente Álamo, San Javier, San Pedro del Pinatar, Calasparra y el eje San Javier-Baños y Mendigo.

A lo largo del pasado año se iniciaron los suministros de gas natural a los municipios de Cieza y Torre Pacheco, y en este ejercicio está previsto el inicio de la gasificación de Águilas, así como el estudio y proyecto de la gasificación de Mazarrón. Asimismo, se encuentran en fase de autorización administrativa los ejes de La Unión-El Algar, Lorquí-Archena y Torre Pacheco-Los Alcázares.

Por otro lado, el presidente de EDP España, Manuel Menéndez, ha reconocido la "caída" del consumo eléctrico como consecuencia de la crisis, aunque destaca que "en los últimos meses ha habido un cierto repunte en el consumo eléctrico por el consumo habitual fundamental, pero debido a la crisis ha habido una disminución generalizada en toda España de ese consumo eléctrico".

En esta línea, Menéndez también ha aludido al menor consumo de gas "como consecuencia de la menor demanda de electricidad y del menor hueco para la energía eléctrica producida con gas, debido a la mayor producción como energía renovable".