El vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Competencia, Joaquín Almunia, considera que el 99,9% de sus compañeros de la Comisión cree que es "mucho mejor que Escocia se quede en el Reino Unido" y ha advertido de que los debates "sin salida" perjudican a la economía. Además, ha afirmado que, desde la UE, se pide "diálogo" sobre Cataluña y que no se "prolongue el conflicto" o exacerben "las posiciones respectivas".

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, Almunia ha afirmado que los debates "sin salida, sin alternativa, que no han venido precedidos o que tratan de esquivar el diálogo y la cooperación perjudican a la economía" como el de Escocia.

"Yo he estado en el mes de enero, como todos los años en el Foro Económico Mundial de Davos, y yo me he encontrado allí con inversores que estaban realmente asustados ante las situaciones que se puede dar si en Escocia triunfa el sí, y el debate que está teniendo lugar en el Reino Unido, sobre quién se hace cargo de la deuda, sobre qué va a pasar con el petróleo, sobre qué va a pasar con la moneda, qué moneda va a tener Escocia o qué va a pasar con el Royal Bank of Scotland, que es uno de los mayores bancos de Reino Unido y que tiene su sede en Escocia", ha apuntado.

Además, ha señalado que la Comisión Europa "respeta la opinión de los votantes en el referéndum escocés", pero no cree que "equivocarse" al afirmar que el 99,9% de sus compañeros en este órgano "coinciden" con su opinión de que "es mucho mejor que Escocia se quede en el Reino Unido".

CATALUÑA

A su juicio, "todo este tipo de cuestiones, sin duda, no son favorables para la economía". No obstante, ha considerado que "la situación es muy diferente entre la situación escocesa, donde hay un referéndum anunciado para septiembre y donde se sabe cuál es la pregunta y donde se está prácticamente ya en campaña, de una situación como la catalana, que tiene otras razones, otros orígenes, otros elementos encima de la mesa y se desenvuelve en otro marco jurídico constitucional que es totalmente distinto".

Joaquín Almunia ha afirmado que, desde la UE, se observa "con mucho respeto lo que pasa cada uno de los estados miembros de la Unión Europea y, por lo tanto, no se están escribiendo recetas sobre qué tiene que hacer Rajoy o qué tiene que hacer Mas".

"No, se mira, se ve que hay una tensión que no está encauzada a través de una vía de diálogo suficiente, y lo que se pide siempre es diálogo y que los temas se discutan. En Europa se discute todo en torno a una mesa y se discute todo con las cartas boca arriba, y hay que entender y atender las razones de quienes no están de acuerdo con cada uno de los presentes, y hay que encontrarles vías de salida", ha apuntado.

En esta línea, ha subrayado que, "sin suda, aquí el marco constitucional, estatutario, la historia común, los conocimientos y las relaciones personales, la interdependencia económica altísima, todo eso llama a un diálogo, no llama a prolongar el conflicto y exacerbar las posiciones respectivas".