Las temperaturas descenderán este fin de semana en la mayor parte del país que estará afectado también vientos que incluso superarán los 90 kilómetros por hora en las zonas costeras del norte peninsular. Sin embargo, las precipitaciones cesarán y la estabilidad volverá a partir del lunes a la Península y se mantendrá a lo largo de toda la semana, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

Según ha explicado a Europa Press el portavoz de la AEMET, Ángel Alcázar, este viernes atraviesa la Península un frente que, sin embargo no está dejando precipitaciones importantes. En las últimas 12 horas se han acumulado 16 litros por metro cuadrado en Bilbao. Sin embargo, el viento está siendo el protagonista de la jornada sobre todo en las costas y en las zonas más altas.

Además, con este frente bajarán las temperaturas, que cuando este sábado llegue un frente cálido, puede provocar nevadas en el Cantábrico, algún punto del sistema Ibérico y en las zonas altas, a partir de 1.000 metros de altura en las primeras horas del día. Sin embargo, rápidamente estas nevadas se volverán precipitaciones en forma de lluvia.

Tras este frente cálido, según Alcázar, el mismo sábado, a últimas horas, llegará un sistema frío y provocará un nuevo descenso térmico. Este frente no dejará precipitaciones significativas pero sí habrá viento que motivará avisos de riesgo (amarillo) en toda la cornisa cantábrica. A última hora del domingo también pueden producirse precipitaciones en una zona del Segura y Cazorla (Jaén).

El portavoz de la AEMET prevé que el lunes continúen las precipitaciones pero que en la primera mitad de la semana la situación meteorológica se irá estabilizando en la Península.

"El anticiclón se meterá en la Península y la tendencia es que a lo largo de la semana la atmósfera se irá estabilizando progresivamente. Parece que esta semana no habrá sucesión de frentes", ha explicado.

Asimismo, ha precisado que si el anticiclón entra en la Península, las borrascas irán por latitudes más altas y afectarán menos al conjunto del país. A su juicio, esta situación hará que suban las temperaturas y que haya más horas de sol y menos de nubosidad.

Balance hídrico

Por otro lado, Alcázar ha señalado que en lo que va de año hidrológico (1 de octubre de 2013 a 30 de septiembre de 2014) hasta el 25 de febrero ha llovido en el conjunto de España 351 litros por metro cuadrado, lo que supone un 3 por ciento más que el valor medio normal, que son 240 litros por metro cuadrado.

En cuanto a la distribución de las precipitaciones, ha apuntado que el mayor superávit se encuentra en Galicia, donde ha llovido en torno a un 25 por ciento más de lo normal e incluso en algunas zonas de esta región se supera ese valor. Por el contrario, ha llovido menos de lo normal en todo el arco mediterráneo y en el sur, donde no llega al 50 por ciento de las lluvias normales y, en algunos casos, como en el norte de Valencia y sur de Castellón, no han llegado a registrar ni el 25 por ciento de lluvias de lo normal