Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres personas que integraban un grupo que habría cometido más de 90 robos en domicilios de municipios de la provincia de Barcelona. Según han informado este viernes los Mossos, la gran mayoría de robos se cometieron los pasados meses de diciembre, enero y febrero, aunque a los detenidos, dos de nacionalidad albanesa y el tercero, ecuatoriano, también se les relaciona con asaltos a viviendas en agosto de 2013.

Las viviendas asaltadas se encontraban en las localidades de Caldes de Montbui, Sant Antoni de Vilamajor, Lliçà d'Amunt, l'Ametlla del Vallès, Tiana, Sant Fost de Campsentelles, Rubí, Abrera, Sant Andreu de la Barca y Pallejà.

Los presuntos autores materiales de los robos tienen 22 y 25 años de edad, residentes en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que fueron detenidos el pasado 18 de febrero. Una semana antes habían sido detenidos también en L'Hospitalet un hombre de 24 años, que hacía las funciones de chófer de los anteriores, y su pareja, de 21, aunque posteriormente la detención de esta mujer quedó sin efecto.

La pista que dio con los ladrones fue el robo en el municipio de Sant Andreu de la Barca de un aparato electrónico que permitía su localización, lo que llevó a los investigadores hasta la persona que hacía las funciones de chófer. A raíz de esta detención se pudo determinar que los autores materiales de los robos vivían en otro domicilio de L'Hospitalet, por lo que se pidió al Juzgado una entrada y registro del mismo.

La entrada en este domicilio tuvo lugar el pasado 18 de febrero por parte de agentes del Grupo Especial de Intervención, que detuvieron a los dos ciudadanos albaneses y recuperaron objetos procedentes de múltiples robos. La banda estaba especializada en robar viviendas y casas que se encontraban en urbanizaciones, habitualmente en zonas retiradas y próximas al bosque, a las que accedían a última hora de la tarde.

La mayoría de las viviendas no disponían de alarmas, aunque en algunos casos las habían inutilizado, y aprovechaban los momentos en los que no había nadie en las viviendas, aunque si ocasionalmente hallaban a alguien evitaban el enfrentamiento y optaban por huir. Los objetos que sustraían eran dinero, relojes, joyas y aparatos electrónicos, principalmente.

Los dos ladrones, de origen albanés, detenidos fueron trasladados por orden judicial, el pasado 20 de febrero, al Centro de Internamiento de Extranjeros de Barcelona a la espera de ser repatriados a su país, mientras el ciudadano ecuatoriano quedó en libertad con cargos.