En un artículo difundido en su blog —www.juancotino.es— bajo el título de 'Pistolas humeantes de ETA y la Entrega Trampa', argumenta que "si ETA tuviera la más mínima intención de entregar las armas, la Policía ya las tendría en su poder".

"Sin embargo —prosigue— estoy convencido que hoy, en cualquier parte de Francia, Venezuela, México, etc. los criminales siguen entrenándose, disparando con sus pistolas humeantes en medio de un monte. Ahí cuentan con el apoyo logístico de los viejos etarras, como es el caso de los recientemente detenidos Juan Jesús Narváez e Itziar Alberdi que hace años estuvieron por las calles de Valencia para asesinar al profesor Broseta".

En la misma línea, agrega que "las armas 'entregadas' la pasada semana tan sólo son el escaso material de un piso franco que, a buen seguro, temerían que fuera descubierto por la policía francesa en cualquier momento".

"No seamos ingenuos. Los criminales de ETA han conseguido con esa puesta en escena cientos de portadas en los medios de comunicación que han contribuido a su objetivo conocido de "internacionalizar el conflicto". Para lograrlo, han contado históricamente con el amparo no sólo de sus simpatizantes de Bildu sino también del PNV y, en demasiadas ocasiones, con la tibieza del PSOE", considera.

Para Cotino, éste es "un acto propagandístico de ETA al que han contribuido los mal llamados verificadores intermediarios, quienes han cometido el error de responder a la invitación de alguien para formar parte de ese no se sabe qué. Tan sólo han visto un piso franco de ETA en Toulouse y tomar unas imágenes delante del escudo de la banda terrorista con una astuta serpiente que, a buen seguro, se los va a engullir".

La banda "ha conseguido la foto"

En opinión del presidente de la cámara autonómica, "ETA ha conseguido la foto que quería exhibiendo unas pistolas, algunos explosivos y las capuchas de las que tan malos recuerdos tenemos todos los españoles". "Sólo faltaba en la imagen la caja de cartón en la que volvieron a guardar las armas para llevárselas a otro lugar más seguro", apunta.

"Desconocemos si esas pistolas (9 mm parabellum) han sido utilizadas para asesinar en alguno de los muchos crímenes terroristas aún no esclarecidos. O si los explosivos son los que robaron en Francia o de fabricación casera. Pero lo que sí tenemos claro es que si al intento de tregua de ETA en 1998 el entonces ministro Jaime Mayor Oreja lo calificó como 'Tregua Trampa', lo de estos días es una 'Entrega Trampa' para que volvamos a hablar de ETA".

Por último, expresa su confianza de que "con la información obtenida a regañadientes por la Audiencia Nacional a los 'intermediarios' se pueda detener el comando e incautarles de verdad las armas para que no vuelvan a ser utilizadas" porque "eso es lo único eficaz y lo que de verdad nos interesa", concluye.