CC.OO ha alertado este viernes de que el desempleo entre la población extranjera residente en Asturias ha crecido un 154 por ciento desde el inicio de la crisis. Además, según el informe sobre la evolución del empleo y el paro en 2013 entre la población extranjera residente en Asturias, elaborado por el sindicato, el número de parados extranjeros que recibe prestaciones se ha reducido un 20 por ciento en el último año.

Según el informe, los datos medios de 2013 cifran en unos 12.900 los extranjeros en alta en la Seguridad Social, en torno a 1.200 menos que un año antes. Así, la destrucción de empleo entre el colectivo (9%) ha sido "mucho más intensa" que la registrada entre la población de nacionalidad española (4%). A juicio del sindicato, "lo más preocupante es que tiende a agravarse, mientras se modera entre la población autóctona".

En este sentido, han explicado que en 2013 el sector servicios proporcionaba ocho de cada diez empleos ocupados por la población extranjera, un 79 por ciento del total. En la hostelería trabajan un 23% de los trabajadores inmigrantes, frente a un 8% de los trabajadores de nacionalidad española; el servicio doméstico proporciona el 22% de los empleos entre los inmigrantes, frente a un 2% de los autóctonos; y la construcción a un 8% frente al 7% de españoles.

"El pasado año no sólo continuó sino que se agravó la destrucción de puestos de trabajo entre los ocupados extranjeros del sector primario (14%), de la industria (18%), de la construcción (31%) y también del sector servicios (4%)", han lamentado. En cambio, la cifra de extranjeros registrados como parados en las oficinas del Servicio Público de Empleo asturianas se redujo en 2013 por primera vez desde que se inició la crisis. Hubo una media de 6.700, 176 menos que en 2012, lo que representa un descenso del 3%, mientras aumentaba un 6% el número de desempleados registrados de nacionalidad española.

No obstante, a juicio del secretario de política social de CC.OO, Juan José Palacios, el descenso del número de parados extranjeros "no obedece a que haya comenzado a crearse empleo entre este colectivo, sino que obedece a dos razones: por la intensificación de los retornos a los países de origen y por la irregularidad sobrevenida que impide renovar la demanda de empleo ante el Servicio Público de Empleo".

Por otro lado, ha incidido Palacios, "la situación de los parados es cada vez más precaria, y en el caso de los extranjeros aún más". En este sentido ha explicado que a finales de noviembre -último dato publicado- las prestaciones por desempleo alcanzaban a 2.726 parados extranjeros, tras reducirse un 20% en el último año. Así, sólo el 41,4% de los parados extranjeros registrados en el Servicio Público de Empleo perciben prestaciones por desempleo (una proporción inferior en siete puntos a la de hace un año), cuando entre los parados de nacionalidad española la cobertura llega hasta el 56,2%.