Puede que te lo parezca a ti. A mí me parece también un buen título, aunque es diferente.

¿Diferente título, diferente estilo?

Los tiempos cambian y lógicamente esto no es ¿Quién sabe dónde? La comunicación ha sufrido una gran revolución y es de eso de lo que nos aprovechamos.

Reciben fotos de gente que supuestamente está desaparecida y que sin embargo están viviendo una nueva vida en otro sitio. ¿No viola ese sistema un poco la intimidad individual?

Las búsquedas deben estar motivadas y venir precedidas por una denuncia policial. Aun así, nuestros redactores investigan para que el asunto sea de verdad una desaparición. Si encontramos a alguien que no quiera ser encontrado, no se emitirá.

Después de tantos años, la gente lo sigue queriendo. Y usted es sinónimo de respeto.

Es muy reconfortante. Es bonito que la gente siga teniendo ese recuerdo; eso me da más responsabilidad cuando emprendo nuevos proyectos.

¿Tiene miedo de pasar la frontera entre la información y el espectáculo?

La televisión es espectáculo en toda regla, el matiz está en hacer las cosas con respeto y educación.

¿Por qué ha elegido a Albert Castillón para este proyecto?

Si has visto el programa, deberías saberlo: es el mejor presentador para este programa, se documenta antes de hablar.

Pero está muy asociado al caso Malaya, ¿no?

Porque sabe de lo que habla. En este caso hay muchos que hablan y pocos que saben.

¿Qué es lo más sorprendente que le ha ocurrido en esta profesión?

Que publicaron una entrevista que se habían inventado.

Yo tendré cuidado con eso.

(Risas). Espero que así sea.

* Antena 3. De lunes a viernes, a las 11.15 h.

Bio

Tiene 56 años y nació en Jerez de la Frontera (Cádiz). Ha presentado programas como Siete lunas, ¿Quién sabe dónde?...