MELILLA, 13 (

Europa rpess)

El presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), se ha presentado este jueves en la frontera entre Melilla y Marruecos para respaldar el trabajo de la Guardia Civil y Policía Nacional y subrayar la gran presión migratoria que sufre la ciudad, que tachó de "insostenible".

En declaraciones a los periodistas y tras saludar a los agentes de servicio en el puesto fronterizo, ha manifestado que "son miles y miles" los indocumentados, principalmente de origen subsahariano, que esperan al otro lado de la frontera una oportunidad de pasar a la ciudad española, y en la mayoría de los casos "usando la violencia".

Imbroda también ha alabado la actitud del director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, después de anunciar que se querellarán contra todos aquellos que ataquen a los miembros del cuerpo y ha expresado que "ya está bien de aguantar los ataques de pseudo-ONG", como las que han divulgado vídeos con las que han intentado poner en duda el trabajo de los agentes de la Benemérita.

La primera autoridad melillense ha dejado claro que "vengo a apoyar a la Guardia Civil y a la Policía Nacional" y subrayar que el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla "está detrás y al lado de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado".

"motos kamikazes"

Por otro lado, la Guardia Civil ha identificado y detenido a los cuatro inmigrantes que entraron en "motos kamikazes" a toda velocidad por la frontera entre Melilla y Marruecos. Según ha informado a Europa Press un portavoz de la Comandancia, los hechos sucedieron el pasado viernes día 7 de febrero sobre las 19,00 horas, cuando dos ciclomotores ocupados por dos personas cada uno de ellos, accedieron a la ciudad española procedentes de Marruecos por la Aduana de Beni-Enzar, "a toda velocidad y mediante conducción temeraria, desoyendo todas las indicaciones de alto que les daban tanto de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía en el control documental como de la Guardia Civil".

Las cuatro personas que ocupaban los ciclomotores portaban cascos integrales para no ser identificados y los agentes actuantes de ambos Cuerpos policiales emprendieron su persecución por la ciudad, sin poder darles alcance, localizándose minutos más tarde en una concurrida calle de la ciudad los dos ciclomotores abandonados, junto a uno de los cascos que portaba una de esas personas sin identificar.

El portavoz ha explicado que desde el mismo momento de los hechos se inició por parte de la Guardia Civil una línea de investigación para tratar de identificar y en su caso detener a las personas que de esa forma tan temeraria habían logrado sortear los controles fronterizos para acceder ilegalmente a la ciudad, "despreciando todas las normas de seguridad establecidas y poniendo en riesgo la integridad física de los agentes que allí cumplían con misión".

Esta línea de investigación ha dado sus frutos y se ha logrado identificar y detener a los cuatro ocupantes de los ciclomotores, todos ellos varones, jóvenes, indocumentados, de edades entre 19 y los 27 años y que dicen proceder de Guinea.

Estas personas, tras acceder a la ciudad y supuestamente con la ayuda de terceras personas, se personaron la misma tarde de los hechos en el CETI (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes), aparentando normalidad en su comportamiento y solicitando su admisión.

Sin embargo, el portavoz policial ha admitido que las gestiones realizadas en el ámbito operativo de la investigación, determinan que esas personas que acudieron al CETI "son las mismas que minutos antes entraron a Melilla con violencia" a través de "motos kamikazes".

Los cuatro han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número Uno de Melilla, como supuestos autores de delitos de atentado contra los Agentes de la Autoridad en el ejercicio de sus funciones y de desobediencia grave, quedando en libertar con cargos a la espera de la apertura de juicio oral por los delitos imputados.