La Guardia Civil de la Región de Murcia ha intervenido una veintena de piezas de marfil expuestas para su venta en un establecimiento público de Totana y que carecían de la documentación necesaria para esta actividad, por lo que el titular del comercio ha sido denunciado como presunto autor de una infracción a la Ley de Reprensión del Contrabando

Dentro de los servicios establecidos para prevenir y perseguir el contrabando, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) han desarrollado la operación 'Marfil' tras sospechar que, a través de un establecimiento público de Totana dedicado a la comercialización de antigüedades, se estaban ofertando piezas de marfil que podrían carecer de documentación relativa a la procedencia y tenencia de estos objetos, un requisito imprescindible para realizar dicha actividad.

La Benemérita llevó a cabo la correspondiente inspección en el comercio y pudo comprobar 'in situ' la existencia de 20 piezas de marfil, entre las que se encontraban cuatro colmillos de grandes dimensiones y diversas figuras de diferente tipo y tamaño, que carecían de la preceptiva documentación. Algunas de las piezas se ofertaban al público por cantidades superiores a los 1.000 euros.

El titular del comercio, al no poder acreditar la legal tenencia y procedencia de las piezas de marfil, ha sido denunciado por incurrir en una infracción administrativa tipificada en la Ley Orgánica de Reprensión del Contrabando.

Las 20 piezas de marfil incautadas por el Seprona han sido puestas a disposición de la Delegación de la Agencia Tributaria en Murcia (Servicio de Aduanas e Impuestos Especiales).