El consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, ha apuntado que no se contempla a corto plazo la reapertura de las villas turísticas que permanecen cerradas, aunque se ha mostrado abierto a inversores privados que estén interesados en reabrir las villas que siguen cerradas.

En una respuesta a una pregunta oral formulada en pleno del Parlamento andaluz, Rodríguez ha explicado que cuando se hicieron cargo de la Consejería, había cuatro villas turísticas abiertas, esto es, la de Priego de Córdoba, Laújar, Bubión y Cazorla y cinco cerradas, siendo la de Grazalema la que presentaba mayor complejidad, toda vez que sus trabajadores estaban inmersos en un expediente de regulación temporal de empleo que cuando terminara, o bien se reabría o los trabajadores no tendrían perspectiva.

El consejero ha precisado que el principal objetivo ha sido "gestionar las villas abiertas y reabrir la villa de Grazalema en 2013, que está

funcionando a un ritmo adecuado de asistencia".

Asimismo, ha precisado que en el resto de villas, que están cerradas, no hay previsión de incorporarlas a la red de villas, toda vez que "su situación actual requeriría de una inversión muy grande, de la que en este momento carecemos".

En ese sentido, ha precisado que en el caso de algunas de las villas que en este momento están cerradas no descarta efectuar las obras necesarias para reabrir, mientras que en otras no se contempla su reapertura a corto plazo.

No obstante, se ha mostrado dispuesto a "hacer un esfuerzo en las villas cerradas, si tenemos recursos necesarios, para la reapertura de la villa de Fuenteheridos", mientras que en el resto de villas "no se contempla ninguna inversión al no disponer de recursos necesarios".

A pesar de ello, asegura que "si hay inversores privados que estén interesados en las villas cerradas, se podrían estudiar mecanismos de colaboración para proceder a su reapertura".

El consejero ha rechazado que exista "incoherencia" en este asunto y ha asegurado que "existe un compromiso para hacer rentables las villas abiertas". Así, ha destacado que en 2013 se ha incrementado en un 38 por ciento los ingresos de explotación y han disminuido en un 20 por ciento los gastos, en el caso de las villas abiertas, mientras que la de Grazalema, "a pesar de sus dudas permanentes, está abierta desde 2013 y con un buen ritmo de explotación".

"Nuestro objetivo es que las villas abiertas ofrezcan números que reflejen una rentabilidad y no queremos para el futuro reproducir errores de gestión del pasado", ha aseverado el consejero, quien ha recordado que cuando asumió la gestión de las villas turísticas, éstas vivían una "situación complicada, con deudas con Hacienda, con la Seguridad Social y con los trabajadores, y hemos resuelto esas deudas, aumentando la rentabilidad".

Críticas del pp

La diputada del PP Rosario Alarcón considera que Rodríguez "es heredero de la pésima gestión del anterior consejero, acometida con el dinero de todos los andaluces, y despilfarrando ese dinero".

Considera que la red andaluza de villas turísticas "está cerrada, abandonada y deteriorada, por lo que está perdiendo su potencial"., tras lo que ha recordado que "hasta cinco veces hemos preguntado en el Parlamento por la situación de las villas".

Aunque ha criticado la gestión del antecesor de Rodríguez, consejera que el actual consejero "lleva ya dos años, con la misma gestión y mimético fracaso", tras lo que ha recordado que la propia Junta "apuntó como objetivo final que las villas fueran gestionadas directamente por Turismo Andaluz".

"El consejero está faltando a la palabra dada y ha ocultado sus planes, haciendo lo contrario de lo que dice", ha agregado Alarcón, quien pide "coherencia" a la Junta y "soluciones" ante lo que es "su fracaso, no el de su antecesor".

Por ello, ha pedido que se reabran las villas turísticas "que son villas de excelencia, de las que la mitad están cerradas y en un estado cada vez más deteriorado" y demanda que "reconozcan errores y diga cuales son sus prioridades; no deben estar instalados en la confrontación".