La consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, María Jesús Serrano, se ha reunido con la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) y con la Asociación de Regantes de Andalucía (Areda) para conocer cuáles son sus inquietudes, analizar sus propuestas y estudiar cuáles son las posibles líneas de colaboración en materia de medio ambiente y los futuros retos del sector en este ámbito.

Serrano, según especifica la Junta en una nota, ha conocido de primera mano las reivindicaciones y necesidades de estas organizaciones y les ha traslado su disposición para trabajar conjuntamente en las cuestiones de competencia del departamento que dirige. Entre otros asuntos, se han abordado la regularización de nuevas comunidades de regantes, el impacto de los elevados costes de electricidad en el regadío andaluz tras la subida de las tarifas por parte del Ministerio de Industria o las obras de trasvase Guadiario-Majaceite.

En este último punto, la consejera ha trasladado a los representantes de Feragua lo acordado con el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, en su última reunión hace unas semanas, en la que mostró la preocupación del Gobierno andaluz por las obras declarada de Interés del Estado que no avanzan al ritmo deseado, y sobre la que ambos dirigentes han acordado fijar reuniones específicas a dos bandas próximamente.

Desde la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio se viene potenciando la cooperación con estas organizaciones para impulsar las relaciones con el sector. La Directiva Marco del Agua de la UE y la necesidad de estar preparado frente a períodos de sequía han reorientado las políticas del Gobierno andaluz en los últimos años hacía la idea fundamental de garantizar la eficiencia y la sostenibilidad de este recurso, aprovechando las mejores tecnologías disponibles, combatiendo el despilfarro y la contaminación del agua. En esta línea se va a trabajar conjuntamente, por ejemplo, en la utilización de las aguas transformadas procedentes de las desaladoras y/o depuradoras.