El Gobierno vasco planteó el pasado mes de octubre a la izquierda abertzale una iniciativa "unilateral" para avanzar en el desarme "definitivo de ETA" y en la consolidación de paz, a través de un documento que no es "una hoja de ruta pactada o comprometida". En ella, el Ejecutivo le pide el reconocimiento del daño causado "injustamente por parte de ETA", el desarme ordenado de la banda, o la aceptación de los beneficios penitenciarios ordinaria ofrece a los presos, "a las que deben acogerse con carácter individualizado".

En declaraciones a Europa Press, fuentes del Gabinete dirigido por Iñigo Urkullu se han referido, de esta forma, a una información publicada este lunes sobre 'una hoja de ruta' que podría haber sido 'pactada' entre PNV y la izquierda abertzale, y que se habría encontrado en los documentos incautados a la abogada e interlocutora del EPPK, Arantza Zulueta.

De esta forma, el Gobierno subraya que en el mes de octubre de 2013 entregó a la izquierda abertzale una propuesta específica para avanzar en la Paz y la Convivencia. El documento se fundamenta en cuatro principios básicos que están expresamente recogidos en su encabezamiento.

Cuatro principios

En él se reclama "el reconocimiento del daño causado injustamente por parte de ETA; la puesta en marcha de un procedimiento de desarme ordenado por parte de ETA; La aceptación y asunción de los beneficios que la política penitenciaria ordinaria ofrece a los presos, a las que deben acogerse con carácter individualizado; y la normalización de la convivencia política en Euskadi contando con las cuatro grandes tradiciones políticas vascas".

En este sentido, el Ejecutivo autónomo niega que, "en ningún caso", se trate de 'hoja de ruta' "pactada o comprometida". "Es una iniciativa unilateral por parte del Gobierno vasco cuyo objetivo es avanzar y adelantar el desarme definitivo de ETA y la consolidación de la paz y la convivencia", ha concluido.