El sexo en su más cruda realidad

Dos padres y sus dos hijos son los protagonistas de esta historia de abusos sexuales a menores en la que se denuncia este tipo de situaciones reales.
Las relaciones sexuales no siempre tienen una cara divertida y positiva.
Las relaciones sexuales no siempre tienen una cara divertida y positiva.
Las relaciones sexuales no siempre tienen una cara divertida y positiva.
Para superar los grandes problemas es importante sacarlos a la luz y hablar de ellos con normalidad. Uno de los conflictos más duros y menos tratados es el de las agresiones sexuales, sobre todo a menores.
Esta dura temática es el centro de la obra El agresor, que sube al escenario la compañía Factoría Escénica Internacional para denunciar la existencia de estos abusos, sobre todo en menores y de manos de sus propios padres.

La representación narra la historia de dos hermanos que sufren abusos continuos por parte de sus padres. Ello les lleva a tener una existencia terrible hasta que ambos se unen y deciden exteriorizar todo lo que les pasa.

El espectador se tendrá que enfrentar a escenas duras en las que el sexo está bastante explícito y también a otras, quizá más duras aún, en las que se muestra la frialdad de los progenitores con el tema que mantiene a sus hijos a un lado de la sociedad.

A pesar de todo, el autor ha querido introducir también una parte cómica basada en la ironía con que hay que tomarse los graves problemas.

* Sala Ambigú. Plaza Poniente. Hoy. 20.30 horas. 7,20 euros.

Un autor con trayectoria

El autor de esta obra es Tomás Jonigk, que ha realizado estudios sobre la época del medievo, literatura contemporánea y teatro contemporáneo en la Universidad de Berlín. Ha conseguido el premio de la Fundación de autores de Fráncfort y el del Instituto Alemán, entre otros. Con esta representación habla sobre uno de los temas que más vende la sociedad: el sexo, y lo hace desde el inicio y con un sentido del humor muy peculiar y único.

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