Sólo un tercio del millón de perceptores en España de las ayudas de la Política Agrícola Común (PAC) son profesionales dedicados a la agricultura y la ganadería, según ha subrayado este viernes la organización UCCL en Segovia, que prevé que la nueva Política para el periodo 2014-2020 no solucionará este problema que afecta al conjunto nacional.

Durante una rueda de prensa para hacer balance del año 2013 y avanzar los propósitos para 2014, el coordinador provincial, Juan Manuel Palomares, ha señalado que el ejercicio que acaba de comenzar será un año de transición de la PAC, que mantendrá los procedimientos de los dos últimos años aunque con un una reducción "importante" de presupuesto.

En 2015, ha explicado en declaraciones recogidas por Europa Press, la reforma se aplicará de lleno y por primera vez los países miembros de la Unión Europea tendrán gran capacidad de decisión a la hora de determinar muchas de las opciones.

Palomares se ha referido a la figura del agricultor activo, aún pendiente de definir, y ha recordado en este sentido el acuerdo regional alcanzado entre las organizaciones agrarias y la Consejería de Agricultura de Castilla y León para fijar una postura común ante el Ministerio.

Al respecto, se ha congratulado de que, aunque no recoge todas las peticiones de UCCL, este consenso refleja un acercamiento a la figura del agricultor a título principal que históricamente ha defendido.

El coordinador provincial, quien ha estado acompañado entre otros por el presidente de la agrupación en Segovia, Eduardo Herguedas, ha adelantado que en 2014 se invertirá mucho tiempo y muchos recursos en la reforma de la PAC, no tanto en lo que se refiere a su aplicación de las líneas generales sino especialmente en la parte destinada al programa de desarrollo rural.

Se trata, ha dicho, de un apartado en el que se incidirá porque de él dependen las ayudas y convocatorias vinculadas a planes de mejora, primera incorporación y medidas agroambientales, entre otras.

Palomares ha manifestado por otra parte que durante el presente ejercicio UCCL seguirá de cerca los asuntos relacionados con la ordenación del territorio, los ataques de lobos, los robos en el campo, los topillos o los fondos de desarrollo rural pendientes de pago. De acuerdo con sus estimaciones, las ayudas aprobadas y no abonadas ascienden a 100 millones en Castilla y León.

En cuanto al modelo territorial, se ha quejado de que la Comunidad ha hecho una "clara sobrevaloración" de las diputaciones y mancomunidades en detrimento de las entidades locales menores y el servicio al ciudadano.

Entre sus propósitos para 2014, la agrupación agraria ha advertido de que luchará contra el cierre de oficinas o puntos administrativos que planteó la Consejería para solventar dificultades económicas, al tiempo que denunciará inversiones de "dudosa" finalidad agrícola y ganadera, como el Centro Ecuestre de Castilla y León, el Centro Acuícola o el Palacio de Congresos de La Faisanera que financiará el departamento de Silvia Clemente.

Procesos judiciales abiertos

Una protesta por este último proyecto, según ha expresado UCCL, se saldó con cuatro miembros de la organización expedientados, que deberán abonar 300 euros de multa. Al respecto, la organización ha apuntado que ha denunciado ante los tribunales el informe redactado por el jefe de seguridad al considerar que el contenido es falso.

La entidad agraria ha señalado que hay abiertos otros procesos judiciales, como el de Mesenor tras su expulsión de Tierra de Sabor, que no fue admitido a trámite por el juez, por lo que se apeló a la Audiencia Provincial de Valladolid. Relacionado con ello, sigue pendiente además la querella criminal contra la viceconsejera de Desarrollo Rural, María Jesús Pascual, por prevaricación. También está en proceso la querella de Silvia Clemente contra Juan Manuel Palomares por calumnias.

Balance de 2013

Del año que termina, UCCL ha señalado que ha sido un ejercicio agrícola "bueno" por la producción y el rendimiento, aunque no desde el punto de vista económico. Al hilo de ello, ha resaltado que ha bajado el precio de productos como el cereal, pero ha ascendido el coste de producción principalmente por el incremento del precio de la energía eléctrica.

En este marco, uno de los sectores más perjudicados ha sido el de la remolacha, antiguamente motor de los regadíos de la provincia y hoy casi "denostado". También ha sufrido dificultades el vacuno de leche y el ovino de carne.

Esta situación se ha acompañado, según ha lamentado Palomares, de importantes caídas del presupuesto que la Junta destina al sector desde 2010. Las partidas, a pesar de que ascienden ligeramente en 2014, son similares a las de hace un decenio, ha criticado el coordinador, quien ha reprochado a la Administración regional su apuesta por la industria frente al sector primario.

UCCL también ha afeado a la Consejería la "falta de compromiso" con las cámaras agrarias y la falta de apoyo económico para la convocatoria de ayudas al sector. Su postura, ha asegurado, ha incidido negativamente en el censo agrario y "lastra" el relevo generacional.