A todos nos gusta(¿ba?) escuchar a Hans Zimmer en la partitura de una película, sobre todo cuando era capaz de combinar sus grandes inyecciones de épica grandilocuente (La Roca, Gladiator), con composiciones más creativas (La delgada línea roja) y juguetonas (Mejor... imposible). Pero quizás en los últimos años, cuando su estilo coquetea con la autocita constante y su compañía Remote Control Productions parece haber infectado la producción musical de todo el cine de gran escala y acción con variaciones sobre Piratas del Caribe, hayamos acabado un poco empachados. Que de vez en cuando marque una nueva pauta después replicada en incontables tráilers, como ocurrió tras Origen, tampoco ayuda. Pero para exponer el daño que la zimmerización musical puede haberle hecho al Hollywood actual, rescatamos el siguiente vídeo de YouTube en el que legolambs ha imaginado cómo sería la climática escena final de una película tan bien musicada como Tiburón si, en vez de contar con el magnético score de John Williams y el inteligente uso del mismo por parte de Steven Spielberg, hubiera tenido una de las orquestaciones frenéticas y omnipresentes de Zimmer. Por supuesto, es el clímax final del filme, así que SPOILER Y VERGÜENZA SI NO HAS VISTO TIBURÓN.
Para completar la comparación, he aquí la escena original:
Más noticias de cine, próximos estrenos y series de televisión en CINEMANÍA.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios