Los Mossos d'Esquadra han detenido a dos empresarios en Gavà (Barcelona) como presuntos autores de varios delitos de estafa por la venta de al menos 66 vehículos comerciales con el kilometraje y las fichas técnicas manipulados. Los arrestados -que son hermanos pero actuaban de forma independiente- anunciaban los vehículos en internet y, posteriormente, vendían en las poblaciones vecinas de Castelldefels y Sant Vicenç dels Horts.

La investigación de los Mossos d'Esquadra se inició el pasado mes de julio cuando una empresa de alquiler de vehículos denunció que unos empresarios estarían vendiendo coches comerciales provenientes de otra empresa de renting con el kilometraje y las fichas técnicas falseados.

Los agentes del Grupo de Investigación y Documentación comprobaron la venta de cerca de 80 vehículos por parte de estas dos personas, 66 de los cuales habían sido vendidos con el kilometraje manipulado y 3 no habían sido manipulados. En cuanto al resto de vehículos, no se ha podido comprobar si estaban alterados puesto que no se pudo contactar con sus titulares dado que su venta se había efectuado fuera de Cataluña.

Una vez informados los titulares de los vehículos, un total de 44, denunciaron los hechos al sentirse perjudicados y engañados dado que habían comprado coches, el kilometraje de los cuales no se correspondía con la realidad.

Un total de 14 fichas técnicas estaban alteradas con anotaciones manuscritas de las diferentes ITV para dar una coherencia lógica a los kilómetros y producir el engaño a los compradores. Los dos detenidos actuaban de forma independiente a pesar de que actuaban con el mismo procedimiento: anunciaban los vehículos en Internet y posteriormente mostraban y vendían los vehículos en las poblaciones de Castelldefels y Sant Vicenç dels Horts.

Los vehículos comerciales provenían de una importante empresa de renting de vehículos que, una vez finalizados los contratos los vendían. Según informan los Mossos, el beneficio que se obtiene con la manipulación real del kilometraje de los vehículos es el aumento del valor del vehículo en torno a un 5-10 %. Los investigadores sostienen que, por el tipo de vehículos comerciales que los dos detenidos vendían, esto podría suponer unos beneficios de entre 1.000 y 3.000 euros por vehículo.

Aun así, el beneficio evidente que se obtenía era aumentar el volumen de ventas de vehículos respecto otras empresas del sector, puesto que de forma genérica los compradores prefieren vehículos con menos kilómetros a precios similares. Hay que destacar que la manipulación en los kilómetros de los vehículos es un perjuicio a los consumidores por el aumento del valor de los vehículos que están comprando y por las posibles reparaciones derivadas de las averías ocasionadas por el desgaste de los vehículos, además de suponer un peligro por la seguridad viaria.