El presidente de Fira de Barcelona, Josep Lluís Bonet, ha afirmado este sábado que en Ifema, la feria de Madrid nacida hace 30 años, "llegaron a creerse que eran los amos" antes de la crisis, frente a la institución ferial de la capital catalana nacida en los años 20.

En un almuerzo-conferencia para clausurar el XVIII Encuentro de Economía en S'Agaró, ha reconocido que Madrid superó a Barcelona, e Ifema llegó a facturar 185 millones de euros antes de la crisis —frente a los 128 de la Fira—, pero ha matizado que fue gracias a los ámbitos institucional y de gran consumo.

Considera muy delicada la situación actual de Ifema, precisamente porque el consumo se desplomó y las instituciones dejaron de gastar para reducir el déficit: "No tienen el espíritu empresarial que hay aquí, ni la visión global del mundo", ha afirmado en referencia a la adaptación que realizó Fira de Barcelona.

Ha señalado la importancia de "ir todos a una" como causa del éxito actual de Fira de Barcelona, y ha ejemplificado que en sus más de ocho años de presidencia ha habido unanimidad total en las decisiones de la entidad, que consta de diversos niveles organizativos con participación público-privada.

Con las empresas y en el mundo

Con la crisis, esta unión se ha concretado en estar "más al lado que nunca de las empresas y los sectores" y promover la internacionalización, con 42 delegaciones en el mundo.

Ha añadido que eventos de relevancia internacional, como el Mobile World Congress y posteriormente la Barcelona Mobile World Capital, permiten a Barcelona y Catalunya "situarse en el mundo".

También ha puesto como ejemplo la reciente captación de Fira de Barcelona, que acogerá en 2014 el salón profesional sobre textiles vaqueros Denim by Première Vision, que hasta ahora se realizaba en París: para él, este salón y The Brandery van a "llenar el vacío" de la feria textil alemana Bread & Butter, que volvió a Berlín tras varias ediciones exitosas en Barcelona.

Fira de Barcelona tiene 70 salones de diversas periodicidades, la mayoría de carácter profesional o híbrido combinando unos días para los profesionales y otros para el gran público, y genera un impacto económico de unos 2.500 millones de euros al año con una atracción de 2,5 millones de personas —un millón, internacionales—.