El alcalde de Santiago, Ángel Currás, ha mantenido este miércoles que no se depurarán responsabilidades políticas en el consistorio a raíz de las imputaciones en la denominada Operación Pokémon y de las sospechas de la jueza instructora, Pilar de Lara, sobre una posible financiación ilícita del PP local.

"Las responsabilidades políticas se tomarán cuando se tengan que tomar, pero no es el momento ahora", ha subrayado, y ha aplazado cualquier medida interna hasta que se levante el secreto de sumario y "se vea el alcance de todo eso y a quién afecta". "Por ahora no tenemos conocimiento ninguno y, por tanto, no podemos manifestarnos", ha abundado.

En este escenario, preguntado al respecto por los periodistas, ha descartado que el PP compostelano vaya a personarse en el caso para lograr acceso directo al sumario una vez se levante el secreto. "Cuando se haga público el sumario conoceremos su alcance, pero no ahora", ha resuelto el regidor.

Esta reacción se produce un mes después de que Pilar de Lara desestimase un intento del Ayuntamiento de Santiago de personarse como afectado en la causa, al interpretar este movimiento la magistrada como un intento de "defender los intereses" del propio alcalde y los otros ediles del grupo de gobierno imputados.

En todo caso, Currás ha reiterado que está "muy tranquilo", porque "lo único" que ha trascendido es que la jueza "puede estar abordando el tema de la financiación" de su partido en una pieza separada. Así, su única petición es "que se levante el secreto de sumario" cuanto antes, puesto que no se puede "seguir mucho más tiempo" en esta situación.