Vino con el Derecho Canónico a decirnos que si salíamos así nos excomulgaba.

El Obispado dice ahora que no les excomulgará, pero que revisen las letras.

Me da alegría, porque la cosa es que somos católicos, pero el problema es que se nos ha censurado sin conocer las letras de nuestra murga. Y las letras no dicen nada malo; lo único es el título de la murga: Mi primera hostia.

Qué le dijeron al párroco cuando les dijo que si salían así los excomulgaba.

Le dijimos que la Iglesia debe estar para cosas más importantes y que había hasta asesinos a los que no se les excomulga. Vamos, también nosotros nos hemos podido equivocar.

Bueno, al menos le deben la publicidad gratuita.

Sí, eso sí, pero yo he pasado un mal rato. Hoy llevo todo el día teniendo que salirme del trabajo para coger el móvil.

Al menos, la murga será buena, ¿no?

Eso es lo peor, que somos normalitos, más bien malos. Como vengáis todos a vernos vais a decir: ¡Vaya, qué malos son!

BIO

Antonio Jesús Márquez forma parte de la murga de la polémica. Es el duodécimo año que este montillano se presenta al concurso.