El Tribunal Supremo ha confirmado la pena de tres años y medio de cárcel impuesta por la Audiencia Provincial de Huelva a un toxicómano en tratamiento de metadona que mató a un amigo tras echar en su copa una cantidad indeterminada de esta sustancia. Se le condena por un delito de lesiones en concurso con un delito de homicidio imprudente.

La resolución del alto tribunal, de la que ha sido ponente el magistrado Perfecto Andrés Ibáñez, desestima los motivos presentados por la defensa de Manuel P.A., quien recibía semanalmente siete comprimidos con una concentración de 100 miligramos de dicha metadona y que, durante una noche de fiesta en una discoteca de Valverde del Camino, vertió una dosis no determinada de esta sustancia en la copa de un amigo.

La bebida fue consumida por la víctima y una mujer, y ambos se sintieron mal y fueron atendidos en un centro hospitalario. La mujer se recuperó posteriormente mientras que el hombre falleció de un edema agudo de pulmón.

El alto tribunal declara que la Audiencia de Huelva justificó, "de modo racional y con bastante apoyo probatorio" la afirmación central de los hechos y dio respuestas a todas las cuestiones suscitadas durante el juicio, por lo que no puede estimar las alegaciones del recurso de casación de la defensa.